PAMPLONA. Intenso, tremendamente disputado, y no apto para cardíacos. Así fue el buen partido que realizó ayer el Helvetia Anaitasuna ante el Octavio Pilotes Posada.

Los navarros consiguieron frenar, de nuevo, a uno de los gallitos de la División de Honor Plata como es el equipo vigués que, pese a la derrota, sigue primero en la clasificación. El conjunto de Aitor Etxauburu llegaba al partido de ayer con muchas opciones de plantarles cara, sobre todo después de vencer la semana pasada, también por tan sólo un gol, al Obearagón Huesca, segundo de la tabla.

Se presuponía un partido difícil, rápido en las contras, y sobre todo, de enorme concentración. Y así fue. Los navarros infligieron la tercera derrota de lo que va de temporada a los de Vigo en un encuentro con muchos tantos, donde el carácter ofensivo se impuso al defensivo en un partido que no se resolvió hasta los últimos segundos.

Comenzó la lucha con una gran precisión en los lanzamientos de los navarros que enseguida se impusieron en el electrónico, llegando a una diferencia de 10-1 en el minuto 10. Con un Diego Moyano impresionante bajo palos y con una gran efectividad a la contra, el Helvetia vio como la distancia con el Octavio iba en aumento. Aunque esa diferencia no duró todo el partido ya que a partir del cuarto parcial el líder aterrizó en el pabellón, dejó a un lado la blanda actuación puesta en escena hasta el momento, e impuso la calidad que posee.

Empezó a acertar en sus lanzamientos, sobre todo desde las manos de un Rubén Montávez que desde su posición de central repartía el juego y anotaba pasando por encima de la defensa navarra. Así, se llegó al descanso y los de Quique Domínguez ya habían reducido la ventaja a 20-15.

En la reanudación, los visitantes siguieron con su juego y se acercaron peligrosamente al Helvetia que vio mermado la eficacia ofensiva con la que había comenzado el encuentro, hasta que la diferencia entre los dos conjuntos fue de tan sólo un gol. Así siguió el partido hasta que llegaron los minutos finales y con ellos, los nervios.

En una jugada después de un tanto del Octavio Pilotes Posada, los de Etxauburu lograron marcar y subir al luminoso el 31-30. Pero quedaba tiempo para una última jugada. Los rojos cogieron el balón, hilaron una ocasión que acabó en falta, y al final, no pudieron marcar el gol que habría supuesto el empate entre el líder y el quinto. Así, el Helvetia sigue ilusionando. Y no es para menos, dos victorias ante dos grandes que saben a gloria.

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HELVETIA ANAITASUNA Moyano (p), Rodríguez (2), Hiliuk (2), Chocarro (6, 3p), Cancio (6), Viktor (3), Djukic, Juan Pablo (2), Martínez (2), Reig (4), Rodríguez F. (1), Sánchez.

OCTAVIO PILOTES POSADA Javier Díaz (p), Edu Moledo (2), Mikalauskas (1), Eran Abramovich, Nando Martínez, Rubén Montávez (8), Cacheda (6), Leonel Maciel, José Fernández Sedano (5, 2p), Miro Basiric, Cerqueira (1), Pavol Polakovic (4, 1p), Francisco González (1), Víctor Frade (1).

Marcador cada cinco minutos 6-1, 10-1, 13-3, 14-9, 16-14, 20-15 (descanso); 21-18, 22-20, 25-23, 27-25, 30-28, 31-30.

Árbitro David Monjo y Fernando San Pedro. Excluyeron a los locales Rodríguez, Reig, Chocarro y descalificó a Viktor. Y por el Octavio Pilotes Posada excluyó a Eduardo Moledo, Cerqueira, y descalificó a Mikalauskas.

Estadio Anaitasuna. 400 espectadores.

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