Iñurrategi, Vallejo y Zabalza vuelven satisfechos
Los montañeros vascos Alberto Iñurrategi, Juan Vallejo y Mikel Zabalza han vuelto satisfechos con lo logrado en la cumbre Nuptse (Himalaya), pese a no haber alcanzado la cima situada a 7.861 metros de altura.
BILBAO. Iñurrategi ha opinado que no haber completado el ascenso no ha supuesto ningún tipo de fracaso: "La cima es un trofeo bonito, pero aun no habiendo llegado a ella, hemos vuelto muy contentos del intento".
Ha explicado que las condiciones meteorológicas no fueron favorables en ningún momento de la ascensión.
Tanto es así que los montañeros vascos no pudieron abrir una vía propia y decidieron seguir el camino que en 1961 abrió por primera vez una expedición inglesa.
"Aunque los partes meteorológicos no eran favorables, decidimos subir e intentarlo" ha relatado el montañero vasco. "No salimos con mucha confianza, pero al llegar a los 6.500 metros vimos que era una buena oportunidad", ha añadido.
Una vez alcanzados los 7.000 metros y establecido un campamento, los montañeros notaron la fuerza del viento a cada metro que subían.
Tras alcanzar la cota de 7.700 metros, decidieron que subir en esas condiciones "no era seguro" y fue por ello por lo que bajaron.
Los tres montañeros se vieron sorprendidos cuando la gente esperaba un segundo intento por su parte ya que llegaron "muy cansados, sin fuerza para una nueva ascensión y sin sentir las piernas".
Vallejo ha revelado que el terreno fue "más pendiente y complicado de lo esperado" y que por ello el ascenso a la cumbre se convirtió en "una ascensión muy comprometida para el estilo alpino".
Zabalza por su parte ha reconocido que la ascensión era "de muchísimo riesgo" ya que "era una ruta no practicada en el estilo alpino", al tiempo que ha considerado un éxito "haber bajado sanos y salvos".
En cuanto a planes de futuro, los montañeros vascos no han pensado en ninguna nueva ascensión de momento ya que "son tiempos duros para hacer este tipo de ascensiones" debido a la crisis y a la falta de patrocinios.