Aitor García Andueza, un joven halterofilista de 14 años y originario de Pamplona, que compite en la categoría -60, está participando en el Campeonato de Europa sub-15 de halterofilia, que se celebra en Madrid del 23 al 31 de julio. El joven competidor, que se estrenará este viernes, se enfrentará contra los mejores halterofilistas del continente de su edad, también vivirá experiencias nuevas, como viajar solo, cargado de nervios, de ilusión y con la dedicación de haber preparado este torneo con varios meses de antelación.

Además, ha conseguido hitos como participar en un torneo sub-17 con tan solo 14 o los récords navarros conseguidos en el Campeonato de España sub-17 el pasado mes de mayo: 80 kilogramos en arrancada, 99 kilogramos en dos tiempos y 179 kilogramos en total olímpico. Unas hazaña que indican la carrera tan prometedora que tiene en sus manos.

Una experiencia nueva

A pocas horas de emprender su viaje hacia Madrid se mostró sereno, aunque no ocultaba que los nervios ya estaban presentes. “Siento nervios por el viaje, porque es una experiencia nueva. Nunca he viajado solo y nunca he estado tanto tiempo en una competición”, admitió. Aún así, le podían más las ganas que los temores: “Quiero competir ya y demostrar lo que he entrenado”.

Para calmar la tensión, el joven explicó que intenta desconectar en los días previos a la competición. “Lo primero que suelo hacer es pensar en otra cosa, intentar dejar de lado los pensamientos sobre el torneo”, contó.

El control de los nervios suele ser parte de su rutina, como lo son sus entrenamientos. “He estado preparándome desde la última competición, que fue en febrero, y desde entonces tengo el foco en el Europeo”, dijo con orgullo.

El joven de 14 años entrena cuatro días a la semana durante una hora y media o incluso dos, dependiendo de la programación de sus entrenadores. La pauta es clara: comienza con estiramientos y movilidad y después hace un poco de barra para calentar la técnica. “Las primeras semanas de preparación suelen ser con poco peso, pero muchas repeticiones porque es para hacer volumen. Y después hago halterofilia para la musculación”, explicó. En el bloque de musculación se centra en ejercitar las piernas y realizar sentadillas. Además, completa con trabajo de bíceps, tríceps, espalda y con “mucho abdominal y lumbar”, como el mismo indicó.

Y a los pocos días de iniciar la competición la rutina ha ido cambiando, que se caracteriza por realizar una semana de descarga. “Hago mis máximos y pocas repeticiones, así te mantienes bien y no haces ejercicio físico de más”, contextualizó.

Sobre qué espera de su actuación en el Europeo dijo que espera disfrutar y aunque no se imagina en el podio sí que se ve en él en el Campeonato de España. “He soñado muchas veces ganar el Campeonato de España, pero un Europeo no”, dijo. Y añadió que “ya soñaba yendo a un Europeo y al final lo he conseguido”.

De hecho, García ya ha participado en categorías sub-17. “Competí en el Campeonato de España sub-17 y quedé cuarto”. Reconoció que, al competir, con chicos mayores que él, hay diferencias notables: “Sobre todo los primeros son bastante grandes”, aunque eso no le intimida: “Me siento a gusto compitiendo en sub-17”.

Otra novedad para él será la de estar sin su familia los primeros días. “Desde el 23 y hasta el 25 estoy solo con mi entrenador, pero viene luego mi familia a apoyarme”, explicó.

Su presencia, asegura, le da fuerza: “Me gusta mucho que me vean, me siento seguro cuando me ven. Son como una ayuda para mí”.

De entre todos sus familiares, destacó a su padre Eduardo García como figura clave. “Es el que me hizo ir a halterofilia y el nos ha empujado a mí y a mis hermanos a hacer deporte. Le estoy muy agradecido”, recordó. También habló de sus entrenadores, Mikel Muniáin y Chicho: “Me parecen una pieza fundamental en lo que he conseguido. Me han ayudado muchísimo y están en todo, para halterofilia o para lo que no es halterofilia”.

Ambición y calma

Sobre el futuro, el joven halterofilista se ve con ambición y con los pies en la tierra. “Me veo ganando algún Campeonato de España y poder ir a otro Europeo. Todavía me quedan tres años, y en tres años hay mucha mejora”, reflexionó Aitor. Aunque sabe que no será fácil, no renuncia a nada: “Si sigo entrenando así, podría llegar... pero también es muy difícil porque los competidores también tienen margen de mejora”.

Una parte importante de ese desarrollo será físico. Actualmente compite en menos de 60 kilogramos, pero le gustaría aumentar masa muscular. “No quiero coger algo que no sea músculo, porque no sirve”, zanjó.

Cuando se le preguntó qué espera de esta experiencia, Aitor respondió con madurez: “Me va a ayudar a independizarme un poquito, para mi edad adulta y eso, para saber lo que es”. En lo deportivo, lo ve como una motivación: “Me parece una gran experiencia y me va a servir para motivarme aún más, y querer entrenar y querer más de la halterofilia”.

Con 14 años, Aitor tiene todavía mucho camino por recorrer, pero lo hace con la actitud adecuada. “Lo voy a disfrutar a tope y quiero exprimir esta experiencia todo lo que se pueda”, concluyó. Su historia inspira madurez, disciplina y pasión por un deporte que, para él, es mucho más que levantar peso.