Pamplona - Mientras sus compañeros andaban lanzados en el partidillo, tan sólo unos metros más allá, Unai García también se esforzaba en uno de los campos insistiendo en la recuperación minuciosa que requiere una grave lesión, la del ligamento cruzado de la rodilla izquierda, con la que despidió prematuramente la pasada temporada. “Hoy (por ayer) se cumplen cuatro meses de la operación. No quiero hablar de plazos para volver, porque sería meterme presión. En mes y pico, por ahí andará, espero estar con el grupo poco a poco”.

Las impresiones de Unai García -27 años, 121 partidos de Liga con el primer equipo- son las de un jugador ansioso por reponerse y, en un día como ayer, las de un futbolista de la casa agradecido por la ampliación de su contrato por parte de Osasuna en un periodo de incertidumbres y dudas, como lo que corresponde a la recuperación de una lesión. “Lo primero quería agradecer el detalle de Osasuna. Ha pasado conmigo y ha pasado con otros jugadores, que en las lesiones de larga duración lo primero que te dicen es que se va a renovar y eso al jugador en este trayecto le da mucha tranquilidad. Es algo que en este club se hace muy asiduamente pero no pasa así en otros y es de agradecer y valorar”, dijo en su comparecencia ante los medios de comunicación, tras el entrenamiento matinal en Tajonar. “Dos años más mínimo que estaré por aquí y seguro que serán muchos más. En el equipo de casa, en Primera, poco más se puede pedir”. Abundando en estas impresiones, Unai García, uno de los capitanes y hombre de la cantera, incidió todavía más en lo que espera de su trayectoria. “No he recibido ofertas de nadie”, respondió cuando se le preguntó por un presunto interés del Athletic en otro momento. “Es un sueño renovar por Osasuna. Soy un chico de la casa y no voy a forzar ninguna situación. Voy a ir de la mano del club”, insistió a la hora de hablar de su futuro. “Me gustaría seguir en Osasuna, pero en dos años a lo mejor no quiere que sigan y tengo que irme a otro sitio”, dijo bromeando.

La faceta del canterano agradecido por la renovación, dejó paso también a la del futbolista deseoso de convertirse en uno más para el entrenador. “Sí, tengo muchas ganas. Las ganas van de serie porque es duro estar sin poder hacer lo que te gusta durante tanto tiempo y el hecho de ver que la vuelta (al equipo) sea en Primera División aún aumenta las ganas”.

“De momento estoy teniendo una recuperación que no tengo queja por lo que me dicen las personas que saben de esto”, continuó. “Estoy teniendo buenas sensaciones y estoy entrando en el último tramo por fin y con ganas de ir entrando poco a poco en el grupo”.

Pilar del equipo en el último ascenso, Unai García no puede evitar rebelarse ante la condición de espectador. “Tengo envidia sana del equipo y de mis compañeros. También nos lo hemos ganado estar ahí y tengo envidia ahora que me toca vivirlo desde la grada. Tenemos una plantilla de Primera, con jugadores de calidad, y no será fácil entrar”.

“Con la lesión, he tenido el hándicap de que se ha producido con el salto a Primera, que se trata de una categoría nueva”, prosiguió sus reflexiones. “Esta temporada no ha sido como la otra vez que subimos, no ha sido una sorpresa porque lo hicimos con tiempo. Una lesión de este tipo nunca viene en buen momento, pero me lesioné con el equipo ya casi en Primera desde hace un mes y también he tenido las vacaciones y la pretemporada por delante, con lo que le he ganado tres meses a la recuperación”. Además, Unai García está viendo un gran rendimiento en los compañeros que juegan en su posición. “El puesto está más que cubierto. No voy a forzar, porque me da miedo volver a recaer. Al principio, con una lesión de éstas, cambias de rol y es difícil tener buena cara. Pero lo que has dado a los compañeros lo recibes de vuelta. Va a estar complicado hacerse con un sitio en el equipo, pero si me encuentro al 100%, voy a intentar tener mi oportunidad”.