yeda (Arabia Saudí) - La abrupta derrota encajada ante el Atlético Madrid en la semifinal de la Supercopa en Yeda (2-3), y su ausencia en la final de mañana (19.00 horas) ha vuelto a poner en cuestión la continuidad de Ernesto Valverde en el banquillo del Barcelona.

Al preparador extremeño, acostumbrado a lidiar con los rumores sobre su permanencia en la entidad azulgrana, se le acumulan los detractores cada vez que el equipo sufre un contratiempo.

Yeda fue una decepción más para añadir en el currículum de Valverde en su aventura con el Barcelona, que se despidió, inexplicablemente, del primer trofeo de la temporada. A las críticas sobre el juego del equipo, especialmente en los últimos tiempos, se unió el revés padecido en el estadio King Abdullah Sports City frente el Atlético Madrid. Y eso que el cuadro barcelonista ejecutó uno de sus mejores partidos durante 80 minutos, con Leo Messi en versión estelar. Pero la desconexión que evidenció en el tramo final le costó una derrota insospechada hasta ese momento.

El Barcelona pudo golear y perdió. No es la primera vez que el plantel que lidera Valverde echa por tierra todo el recorrido ganado. El revés en Yeda es un reproche más a un equipo compuesto por un plantel extraordinario y con el mejor jugador del mundo que no termina de redondear el trabajo.

A otro nivel, el varapalo en Arabia Saudí recordó las noches negras en el Olímpico de Roma y en Anfield, fracasos que marcan el trayecto de su entrenador en su estancia en el Camp Nou.

Algo no marcha en momentos concretos en el conjunto azulgrana, víctima un año tras otro de desconexiones que le llevan a la frustración. Hace dos años fue Roma la que evitó una campaña impecable. El pasado curso, el Liverpool, y después el Valencia en Copa, dejaron la hoja de méritos del equipo en un título de Liga que es ya más que habitual.

En Yeda, el Barcelona dijo adiós a un torneo menor. Pero produjo dolor la forma en que sucedió. Un descalabro que le apartó del primer trofeo y de la posibilidad de volver a cuestionar el momento al alza del que presume el Real Madrid, y volvió a sembrar dudas sobre el futuro de Valverde en el banquillo del club.