pamplona - Osasuna Magna vuelve a Valencia para participar en una Copa de España 17 años después de que debutase en el torneo en 2002. El equipo de Irurtzun tuvo que volverse a las primeras de cambio al caer en cuartos de final. Ahora, la esencia de aquel Xota es la misma, a pesar de haber cambiado de nombre y de plantilla, de la que solo se mantiene el cuerpo técnico. Ahora, la situación es diferente y el equipo, salvo Juninho, cuenta con experiencia en el torneo. De los trece componentes del actual plantel, Roberto Martil con 9, Rafa Usín con 7 y Alexandre Araça con 6, son los hombres que más veces han tomado parte en la competición.

Los Eseverri, Afranio, Passarinho o Leandro de entonces se han convertido en los Martil, Araça o Usín, pilares de un equipo que está en continuo crecimiento, pues todavía no ha alcanzado su techo, y mantiene la ilusión del primer día. A pesar de no comenzar el campeonato liguero con buen pie, Osasuna Magna recuperó la regularidad a base de trabajo y, tras dieciocho partidos en los que solamente ha concedido una derrota, el equipo que dirige Imanol Arregui afronta la Copa de España en tercera posición y, hablando desde la experiencia y con los pies en la tierra, tienen la ambición de llegar a lo más alto.

La victoria que lo cambió todo

Un inicio complicado

La participación de Osasuna Magna en la presente edición de la Copa de España es el claro ejemplo de superación. A pesar de la racha y el buen estado de forma que atraviesa el equipo, la victoria ante Palma en la quinta jornada cambió la dinámica de un equipo que tuvo un inicio complicado con un empate en las primeras cuatro jornadas.

Ahora, los 47 puntos que ha sumado el club de Irurtzun a falta de 7 partidos para la conclusión de la temporada regular invitan a pensar en que pueden llegar a los 62 que consiguieron la pasada campaña, siendo este el récord histórico del club. Sin embargo, desde el vestuario no han hablado de alcanzar o superar esa cifra, sino que, como reconoce Araça, “nosotros vamos partido a partido, de momento no pensamos en el récord de puntos del club, nosotros lo que intentamos es ganar todos los partidos posibles y cuando queden una o dos jornadas, lo veremos”.

El mensaje que manda una plantilla que se ha colado entre los tres grandes no es otro que “el trabajo y la dedicación dan sus frutos. Creo que somos un bloque que lleva varios años trabajando juntos, y nada de lo que nos ha pasado ha sido por casualidad, sino porque estamos haciendo las cosas bien y al final la gran virtud que tenemos dentro del vestuario es que no hablamos de lo que podemos llegar a hacer, o sino de lo que vamos haciendo. Vamos día a día y vamos trabajando para conseguir los objetivos a medio plazo”, señala Rafa Usín, máximo artillero del equipo con 21 dianas, una por debajo de las 22 con las que lideran Carlitos y Ferrao la tabla de goleadores.

Roberto Martil, capitán del equipo, recuerda aquel inicio, en el que “en el equipo había bastante más tranquilidad de la que realmente podía parecer que hubiese. Sabíamos que estábamos trabajando bien, a pesar de que tuvimos un inicio complicado contra equipos difíciles. Nos hubiera gustado empezar mejor, pero tanto desde el club como la plantilla teníamos la tranquilidad de que íbamos a salir de ahí con mucho trabajo, porque en cada entrenamiento era una gozada ver la intensidad que teníamos y desde que empezamos a ganar eso nos dio moral. Pero también es verdad que trabajamos un montón para sacar eso adelante”.

mucho más que un equipo

El sentimiento verde

Osasuna Magna lleva manteniendo un mismo bloque o uno muy similar durante los últimos años. A Roberto Martil, capitán tras la marcha de Javi Eseverri y uno de los emblemas del equipo, se les escapa una sonrisa cuando escucha que la gente que llega al conjunto de Irurtzun habla maravillas de su club, del de su tierra.

“Es muy bonito que gente que llegue de equipos importantes o gente como Rafa y Araça, que se van fuera y luego su primera y única opción es volver a su club de origen, y eso habla muy bien del club. Que luego tenemos nuestras cosas mejores o peores. Creo que hacemos bien las cosas y luego somos un club familiar, que eso es lo que se pide a los que vienen de fuera, que se unan, que no solo estén entrenando en la pista, sino que también estemos fuera y creo que está claro que estas dos personas que están aquí (en referencia a Rafa Usín y Alexandre Araça) son parte de este club y este escudo”, relata el capitán.

Al igual que esta temporada han aterrizado en Pamplona Álex Diz, Javier García Chino (que tuvo que irse en diciembre por motivos personales), Adri Ortego y Juninho (que fue fichado junto a Pedrinho, pero este se encuentra cedido en Segovia), en su día llegaron a la capital navarra Alexandre Araça y Rafa Usín. El cierre brasileño recuerda que la primera vez que pisó el vestuario “fue un poco más complicado por el tema del idioma y la cultura, pero la verdad es que me acogieron muy bien. Eran otros tiempos, era todo muy distinto, pero poco a poco, con el cariño que me dieron hicieron que cada día uno se va haciendo un poco más verde”.

El caso del pívot madrileño es diferente, porque, como él mismo admite “empecé aquí y me he hecho jugador y persona aquí. Vine con 19 añitos y he crecido de la mano de Palote de gente joven y del club y al final es un sentimiento diario el ser verde, que parece fácil decirlo, pero que al final agrupa muchos valores que no lo tienen los demás equipos y creo que eso es lo que nos hace diferentes”.

Tal es el cariño que guardan al club de Irurtzun, que no tuvieron ninguna duda en volver una vez dejaron una familia que no les cerró la puerta, sino que los recibió de vuelta con los brazos abiertos. “Hay que respetar la filosofía del club. Lleva 20 temporadas, siempre con la misma filosofía, y tienes que encajar. No vale de nada venir e intentar implantar otras cosas de otros clubes, porque no sirve”, coinciden, agradecidos, ambos jugadores.

A esta familia verde de la que forman parte los jugadores hay que añadir el valor de una afición que cada dos viernes llena la grada de Anaitasuna. “Hemos tenido un crecimiento muy grande y eso es gracias al club y a la plantilla, que hemos conseguido esa regularidad. Al final el estar arriba hace que se animen más y es muy bonito ver el crecimiento desde que estábamos en la Universidad Pública, a la que venía menos gente o lo hacían de manera irregular, y ahora es una pasada. Para mí está entre las mejores aficiones del campeonato liguero y se ve cuando viene cualquier equipo de abajo, o en fechas complicadas por puentes, en las que si no se llenan se roza el lleno. Es una auténtica pasada y lo hablamos mucho en el vestuario”, reflexiona Martil.

no conocen sus límites

Ambición por la Copa

Con 490 kilómetros de distancia desde Anaitasuna al pabellón Fuente de San Luis, Osasuna Magna es el equipo que más distancia tendrá que recorrer para disputar la Copa de España. Sin embargo, contarán con el inestimable apoyo de 300 aficionados.

El conjunto de Irurtzun llega a la cita en el mejor momento de la temporada, pero un ambicioso Rafa Usín espera que todavía el equipo tenga un margen de mejora, porque “todavía quedan siete partidos de liga regular y que podamos superarlos significará algo muy positivo para el final de temporada. Pero, como he dicho estos días, da igual cómo llegues a la Copa, al final la experiencia dice que hay equipos que han llegado en su mejor momento y en cuartos de final se han ido porque han perdido contra equipos que a priori eran inferiores, y equipos como Jaén, que en su momento no llegó bien, tienen dos copas. Al final hay que llegar en las mejores condiciones posibles, y hasta que no suene el silbato y ruede la pelota no se va a saber cómo llega cada equipo” apunta el madrileño.

Los tres jugadores coinciden en que la Copa es un torneo especial, pero, además, Araça añade que “para mí es el mejor torneo del mundo, porque están los mejores ocho equipos de la mejor liga del mundo. En cada partido de la Copa la intensidad es muy alta y es totalmente distinto a la Liga. Si tú no estás al 100% en la pista te puede tocar ir a casa, no es como la Liga, donde si pierdes un partido la importancia es menor porque la semana siguiente tienes otro. Lo más bonito de la Copa es la igualdad entre los participantes”.

Hasta la fecha, Osasuna Magna ha disputado las últimas 8 ediciones seguidas de un total de las 14 en las que han participado los de Irurtzun en sus 41 años de historia, desde que se fundase en 1978. Roberto Martil, miembro de la actual plantilla que más ediciones tiene en sus piernas, valora que “está claro que el Xota (por Osasuna Magna) es un equipo de Copa y de play off que le ha hecho ser un referente a nivel nacional, y es muy bonito. Sí que es verdad que al llevar tantos años, jugar la Copa parece algo medio normal, algo fácil, pero detrás de ello hay un trabajo de muchas temporadas y es importante, porque sino sería impensable estar ahí”.

Los tres jugadores recuerdan la primera vez que participaron en este torneo. El propio capitán recuerda que su “primera copa fue en Zaragoza en 2006 y no pude jugar, pero recuerdo que fue muy bonito estar con gente como Tete o Eseverri. La primera que jugué fue en cuenca en 2008, en un partido muy bonito que perdimos contra autos Lobelle, que tenía un equipazo y no pudimos pasar. Fue una combinación de estar triste por no pasar y contento por jugar un torneo así”.

Por su parte, Rafa Usín y Araça debutaron en Segovia en 2011. “Fue una sensación espectacular porque jugamos contra el mejor Pozo Murcia de la historia, con que el año anterior perdimos la final de Liga. Perdiendo 2-0 en aquel partido conseguimos empatar a 3 e ir a la prórroga, pero al final nos ganaron por penaltis. Les llevamos al límite y bajaron muchos aficionados a Segovia a animarnos y esa es una de las primeras experiencias que impregnas para sentir lo qué es el sentimiento verde”, apunta el madrileño, mientras que el brasileño, que subraya esas palabras, añade que “fue bonito competir contra gente de primera calidad como eran los Kike, Vinicius, Mauricio...”.

Preguntado por el papel del equipo en esta edición, Rafa Usín estima que “el cuerpo nos pide hacer algo grande y es ganar la Copa. Sabemos que es dificilísimo se tienen que dar muchos factores. También sabemos que no somos una plantilla amplia, pero mentiría si dijese que nos conformamos con caer en semifinales o con llegar a la final. Tenemos objetivos grandes y eso significa ser consciente de que queremos ganar algo”.

Por último, los tres jugadores se atreven a dar un pronóstico. Mientras un valiente Rafa Usín cree que Osasuna Magna se alza con el trofeo, Alexandre Araça no quiere ser menos que su compañero y firma el mismo resultado. Por su parte, Roberto Martil, más precavido, desea empezar ganando a Peñíscola “en penaltis, con gol mío, y luego ya veremos”, concluye el capitán entre unas risas que contagia a sus colegas, síntoma del ambiente que reina en el equipo.