pamplona - Roberto Martil no tenía un papel fácil la pasada temporada. Cogía el testigo de capitán a una leyenda del club, del fútbol sala y del deporte navarro, a Javi Eseverri. La responsabilidad era mayúscula. Sin embargo, el cierre de Irurtzun (24/02/1987) ha cumplido con creces con su cometido. Con su propio sello, ha sabido guiar a sus compañeros sobre la pista y en el vestuario. Rafa Usín y Araça le han ayudado en esta labor y la próxima campaña, la 2019/2020, los tres volverán a capitanear al grupo.

“Año II después de J.E.”, bromeaba ayer en la vuelta a los entrenamientos. “Es una responsabilidad muy grande la que dejó el capi, pero he aprendido de él e intento hacer lo que él hacía, aunque a mi manera. Con la ayuda de Rafa y Araça, tratamos de llevar al equipo hacia donde mejor se pueda”, añadía.

Martil, más conocido en el equipo como Palote, aseguraba empezar la pretemporada “con mucha ilusión”, sabedor de que será “un año bastante complicado”. “Todos los equipos se han reforzado mucho y nosotros vamos a tener una plantilla más corta incluso de lo normal. Pero somos un bloque que llevamos ya muchos años. Tenemos experiencia y gente joven que viene pisando fuerte y en la que confiamos mucho”, explicaba.

El capitán de Osasuna Magna cree que tanto Mario Almagro como Diego Brandao Mancuso pueden “aportar” con creces al equipo. Un equipo que siempre se ha caracterizado por su entrega, por su lucha y por su garra. Algo que, según Martil, seguirán demostrando sobre la pista pese a las adversidades. “En otros clubes igual piden estar arriba, pero en este se prioriza pelear, tener garra, darlo todo sobre la pista y luego ya saldrán los resultados o pasará lo que tenga que pasar. Este año habrá que luchar más por estar entre los ocho primeros, pero lo haremos”. - B.E.I.