En el primer tramo de la temporada hay dos partes muy diferenciadas, un arranque malo y luego una racha de cuatro victorias seguidas. ¿Cuál ha sido la clave?
-Bueno, al principio yo creo que el calendario no nos favorecía nada. Pero también es verdad que a nivel de composición de plantilla, primero con Pichardo, que nos dejó colgados, con el cambio de roles que eso supuso, y con las lesiones de Adrián García y Pablo Yárnoz, nos perjudicó bastante. Adrián García es un baluarte muy importante con todo lo que aporta, sobre todo a nivel de intangibles como la experiencia y la veteranía, y luego a Yárnoz creo que lo vamos a recuperar para el partido de Albacete, es un jugador que conoce la categoría y que a nivel defensivo nos da un salto. Les hemos echado de menos a todos.
La caras más visibles en estas últimas jornadas son Lepichev, que llegó justo en ese momento, y Laron. ¿Qué han aportado al equipo?
-Sobre todo centímetros, fuerza, rebote y en el caso de Simeon también puntos. Tiene bastante calidad en el juego interior, pero también puede abrirse fuera y ayudar en el tiro exterior, algo que nos da muchísima versatilidad y que es más difícil de defender. En el juego ofensivo, gracias a Simeon y a Laron especialmente, los rivales se cierran más y salimos beneficiados en el juego exterior.
Es decir, que además de lo que aportan individualmente, su llegada ha beneficiado al juego del resto.
-Sí, sin duda. En la primera parte era complicado jugar a nivel de espacios por las características de los jugadores, sobre todo cuando no tienes jugadores muy fuertes en el uno contra uno, jugadores que sean capaces de generar por sí solos. No era el tipo de jugadores que teníamos y eso nos perjudicó muchísimo. Simeon y Laron obligan a cerrar la defensa y hay más opciones y beneficia a los tiradores que tenemos.
El objetivo al comienzo de la temporada era claro: la permanencia. ¿Ha cambiado esto, o se mantiene así?
-Ya decíamos que el objetivo era sobrevivir a la temporada y acabarla de la mejor manera posible. Es una temporada complicada por muchos factores, primero presupuestario, luego por el coronavirus. Al principio esas cuatro derrotas nos hicieron tambalear un poquito. Ahora, sin olvidar el objetivo de salvar la temporada, estamos más ilusionados, más optimistas y con más ambición. Creo que es factible buscar una posición como la quinta o la sexta y es algo que el equipo debería luchar por conseguir.
Está claro que la mejor manera de certificar la permanencia es llegar al play off. ¿No es así?
-Exacto. No renunciamos en ningún momento, pero creo que ahora hemos demostrado que podemos competir bien. Tenemos ganas de segunda vuelta, ganas de ver cuán competitivos podemos ser contra rivales como Menorca, Prat y Barça. Y luego está eso, que no haya más lesiones, que no haya más cambios en el equipo y que eso nos permita tener cierta regularidad que en las cinco o seis primeras jornadas no tuvimos.
En la tabla están esos tres equipos muy diferenciados, pero en lo restante hay una igualdad tremenda.
-Añadiría a Albacete junto a esos tres. Tienen dos partidos menos, uno contra nosotros, pero creo que es un equipo que va a estar ahí arriba. Pero sí que es verdad que Gran Canaria también parecía que iba a estar con los de arriba y se ha deshinchado un poquito y eso nos permite que en ese grupo tan mayoritario, del quinto al decimocuarto, esté la cosa muy igualada. Estamos a dos derrotas de los play out y creo que a tres del descenso. Hay una igualdad máxima.
¿Cómo se lidia con todo eso, además de hacerlo con todas las circunstancias normales, y no tan normales, del equipo?
-Lo primero, las planificaciones poco efecto han tenido. Creo que todos nos hemos encontrado con esto. Semanas de trabajo para que a las 48 horas de un partido te digan que no vas a poder jugar, con lo que implica. Casi todos los equipos lo hemos sufrido salvo los tres de arriba, si no recuerdo mal. Por ejemplo, nosotros el martes 22 teníamos que jugar contra Tarragona. Hemos pasado de coger las vacaciones de Navidad con un partido en casa y con la confianza en alto a que ahora, lo primero a ver cuándo se juega ese partido, y lo segundo a ver en qué momento nos coge. Son condicionantes que han afectado y que yo creo que van a seguir afectando. Ojalá me equivoque, pero creo que vamos a seguir teniendo que lidiar con ello todos.
¿Cómo ha sido volver a jugar con público?
-La verdad es que lo veníamos necesitando. Se nota mucho el calor de la grada. Y sobre todo, en un partido igualado, al final ayuda muchísimo. No podemos olvidar que sea en la categoría que sea jugamos para la gente. No he tenido la suerte de vivir muchos partidos en casa, pero sí que los dos que viví la temporada pasada y el del sábado se nota mucho.