De Garralda a Gurbindo

Desde que los Hispanos despuntaron en el panorama internacional y comenzaron a pisar los grandes podios -en 1996, con el doble éxito de la plata en los Europeos y el bronce en los Juegos de Atlanta 1996-, ya casi no dejaron de hacerlo, hasta el punto de sumar 16 medallas entre Juegos (4), Mundiales (4) y Europeos (8).

Y ahí, en sus filas, estaban jugadores como Mateo Garralda, Alberto Martín, Eduardo Gurbindo, Iosu Goñi, Niko Mindegia o Sergey Hernández.

Navarra solo se ha perdido dos citas: los Juegos de Pekín 2008 y los Mundiales de 2013. Y en ambas oportunidades, por culpa de las lesiones.

Mateo Garralda, uno de los mejores deportistas navarros de todos los tiempos, fue partícipe de los albores de aquella selección que de pronto fue capaz de meterse en la elite como socia de pleno derecho, y en su palmarés hay cinco de esas medallas, con los hitos del primer oro en un Mundial (2005) y de los bronces de los Juegos de 1996 y 2000.

Eduardo Gurbindo, bronce ayer en Tokio, ha sido el principal sucesor de Garralda, y no solo por ocupar la misma demarcación (el lateral derecho) sino por su participación y relevancia. En estos últimos Juegos se le ha visto de forma casi permanente en defensa, y muy a menudo en el ataque.

El tercer puesto en los Juegos sigue siendo la barrera infranqueable que le queda a los Hispanos, la última frontera, ya que tiene en su palmarés dos Mundiales y otros tantos Europeos. Habrá que esperar al menos a París 2024. Y pocas dudas se pueden tener de que -si las lesiones les respetan- volverá a haber navarros, porque jóvenes como el portero Sergey Hernández (26 años y ya bronce en el último Mundial) y el primera línea Ander Izquierdo (21 años y ya debutante con la absolua) reclaman un hueco en una selección obligada a renovarse.

JUEGOS (4)

Bronce

Bronce

Bronce

Bronce

MUNDIALES (4)

Oro

Bronce

Oro

Bronce

EUROPEOS (8)

Plata

Plata

Bronce

Plata

Bronce

Plata

Oro

Oro