pamplona. Pero, para esta licenciada en Pedagogía "es esencial proteger todo lo avanzado en materia de conciliación porque contribuye a que los empleados den lo mejor de sí mismos, estén satisfechos y, a su vez, la compañía consigue contar con el mejor talento. La conciliación no es un lujo", indicó.
Blanca Gómez se trasladó ayer hasta Pamplona para asistir a la jornada La conciliación como estrategia empresarial, organizada por la Asociación de Mujeres Empresarias y Directivas de Navarra. "En Coca Cola no tenemos horarios. La flexibilidad ayuda a la competitividad de los empleados, aunque para su aplicación es necesario una cultura de confianza. Ninguno de nuestros empleados se ha excedido en el uso de esta flexibilidad, y cumple los objetivos que se propone". Gómez cree imprescindible "que la alta dirección esté comprometida con la conciliación. Nuestro presidente nos ayuda mucho en este cometido; por ejemplo, él puede acogerse a la flexibilidad de horarios para ir un viernes a Ávila a una carrera de coches, porque le gusta; pero, luego el sábado o el domingo trabaja". Sin embargo, indicó que "hay empleados que saben gestionar bien esa flexibilidad; pero otros tienen más problemas".
"solo hay una vida, no dos" Gómez insistió en que a Coca Cola "no le gusta la idea de dos vidas, solo tenemos una y hay que vivirla de la mejor forma posible mediante la conciliación", aclaró. Esta compañía considera importante cubrir todas las bajas maternales y de enfermedad "porque sino las tareas del trabajador que falta repercuten en el resto del equipo, y eso influye en el rendimiento final". Eso sí, remarcó que "cada empresa debe hacer su propio plan de conciliación, ya que no existe un único patrón para todas". El 54% de las mujeres de la plantilla de Coca Cola se encuentran en edad de tener hijos; y un 15% de los empleados tienen familia numerosa. "Estos perfiles son los que más se benefician de la conciliación", indicó Gómez.
A este respecto, la asesora de gestión del talento (talent management advisor) de Kellogg's, María Rebollo, destacó que "está muy asociada la conciliación con los compromisos familiares y el cuidado de hijos. Pero toda la plantilla tiene este derecho, incluso, los trabajadores que carecen de estas responsabilidades. Por eso, los que no tienen hijos también tienen derecho a conciliar su vida laboral con la personal". Esta licenciada en Psicología defendió que "hay que ser eficientes y trabajar por objetivos: ya que por estar más horas en el lugar de trabajo, uno no es mejor".
Rebollo recordó que el sistema implantado en Kellogg's es "local, no se ha transportado desde EEUU". Y entre sus medidas, propuso reducir gastos de oficinas y edificios, "con la posibilidad de trabajar desde cualquier lugar y con flexibilidad horaria. Cada uno elige el lugar más adecuado para cada actividad".
La directora de RRHH de Coca Cola también aprovechó la jornada para pedir al Gobierno que "premie a las empresas que aplican políticas de conciliación" para que ese reconocimiento tenga un impacto económico sobre la cuenta de resultados, como por ejemplo, "medidas de tipo fiscal".
