pamplona. "En España ya no podemos ampliar más el negocio -con siete plantas de producción, dos centros logísticos, 37 delegaciones propias, 75 distribuidoras y una red de 180 tiendas entre Navarra y Gipuzkoa-. En los últimos diez años hemos invertido 300 millones. Ahora toca crecer más, pero fuera", indicó ayer José León Taberna, fundador y presidente de Panasa, de 74 años.

El veterano economista recibió ayer el premio al Empresario del Año, otorgado por la publicación Negocios en Navarra. Taberna recordó que el grupo factura 230 millones de euros, tiene 2.000 trabajadores -800 de ellos en la Comunidad Foral-, elabora diariamente 400.000 kilos de pan congelado -bajo la marca Berlys-, atiende a 90.000 clientes de pan fresco; y exporta a 20 países de Europa, América y Japón.

280 productos Taberna reconoció ayer que "la actual crisis global es muy potente, la peor que he conocido; pero espero que si se hacen las labores necesarias a partir de septiembre se note un pelín de mejoría y en 2013, el repunte". Sus 280 productos entre pan y bollería también se han visto afectados por el descenso del consumo. ¿Las causas?: "La crisis -1,7 millones de parados en la construcción suponen 1,7 millones menos de bocadillos, además de que la gente ahora tira menos el pan- y la cultura alimentaria de cada país -hace cuatro décadas en España se consumían 90 kilos de pan anuales per cápita, ahora, 46-".

La bajada de la demanda se combate "con el lanzamiento de nuevos productos, y la realización de ofertas sobre aquellos que llevan consolidados en el mercado varios años", recalcó. "Una de las estrategias de la empresa es innovar en calidad y en diversidad de productos mirando lo que sucede en Europa y en las comunidades autónomas", insistió.

En 2011, el consumo de pan en el país descendió un 7% según los datos del Ministerio, pero Taberna está convencido de que la cultura alimentaria está cambiando de nuevo y se volverá a demandar más pan. "Creemos que con marketing y publicidad podríamos llegar a entre los 50 y 60 kilos consumidos al año por persona", remarcó.

entrega de la distinción Taberna recibió ayer el premio de Empresario del Año, en compañía de su mujer María José Armisen y sus hijos, José León -que trabaja en la compañía en el área financiera- y Lucía. "Al recibir esta distinción me acuerdo de mi padre: en los 70, cuando planteé la alianza de panaderías para expandir el negocio en España, él me dijo que si estaba seguro de lo que estaba haciendo, que tuviera en cuenta que el negocio sumaba ya cien años y que tenía una gran responsabilidad. Ahora me gustaría que viera el recorrido de estas cuatro décadas", explicó.

De su larga trayectoria, Taberna se queda con la visión que tuvo para cambiar el negocio -del que representa a la cuarta generación- y acometerlo con una alianza de varios panaderos. "Primero tuve que convencer a la familia y luego al resto de empresarios del sector para impulsar un proyecto en una actividad intervenida, porque el precio del pan estuvo regulado hasta 1986", contó. Para Taberna, un buen empresario debe "analizar los mercados, ser observador, tener un proyecto, ser riguroso, audaz, y contar con un buen equipo".

La presidenta del Gobierno de Navarra, Yolanda Barcina, que asistió al acto, calificó a Taberna como un referente de "cómo se puede conseguir hacer de una empresa pequeña, artesanal y familiar, una de las mejores del sector agroalimentario, líder a nivel nacional". Antes de la entrega del premio, intervino en la jornada la presidenta de Dia, Ana Llopis, quien se refirió al sector agroalimentario para indicar que se enfrenta a "cambios profundos" por las nuevas tendencias del consumidor. "Todo tendrá que ser con velocidad, más rápido, pero también más fresco, artesano y de calidad. Todo será además más cercano y local, pero también global y multisensorial", concluyó.