El sector europeo se moviliza contra la suspensión de la subasta eléctrica ordenada por el Gobierno. La Federación Europea de Traders de Energía (EFET) ha advertido de que la "perjudicial intervención" en el mercado eleva los riesgos regulatorios y, con ello, tirará al alza de los precios finales que pagan los usuarios. "La incertidumbre regulatoria, como el caso de la inesperada cancelación de la subasta CESUR -que arrojó un fuerte incremento que amenazaba con subir el recibo en un 11%-, desincentiva la participación en el mercado y crea un riesgo regulatorio adicional que se incorpora en los precios y que soportan los consumidores finales", afirma esta asociación en un comunicado.