santander - El Juzgado de Primera Instancia número 6 de Santander ha condenado a Caja Cantabria-Liberbank a devolver 253.200 euros de participaciones preferentes y obligaciones subordinadas que vendió a un matrimonio de ancianos de la ciudad, de 95 y 92 años, e invidentes.
De acuerdo con la sentencia, los dos ancianos, -sin estudios, con una invalidez reconocida y en "delicado" estado de salud-, habían adquirido ambos productos en diversas operaciones realizadas entre 2004 y 2008. Además, también habían tenido sus ahorros en cuentas corrientes, algún depósito a plazo fijo y Letras del Tesoro, pero que, según la jueza, Laura Cuevas Ramos, "nada tienen que ver" con las preferentes y subordinadas, ya que estos últimos son "complejos" y de "máximo riesgo", mientras que los anteriores son "aptos para minoristas".
Los ancianos, representados en la demanda y el juicio por sus hijos, desconocen a día de hoy lo que ha ocurrido con su dinero, ya que fue su hija quien se enteró a través de los medios de comunicación de las características reales de los productos donde tenían sus ahorros. En este sentido, la sentencia explica que las operaciones se realizaron dentro de la "relación de confianza" que mantenían con Caja Cantabria (integrada en Liberbank junto con Cajastur, Caja Extremadura y Caja Castilla-La Mancha) y "especialmente" con el director de la sucursal de Cazoña (ya prejubilado) que "desde hace años venía asesorándoles en todas sus operaciones" y que, de acuerdo con los hijos del matrimonio, llegó al extremo de "llevarles personalmente a casa los documentos que debían firmar". Los demandantes deberán restituir los rendimientos recibidos. - Europa Press