PAMPLONA. La economía de Navarra ha crecido en el segundo trimestre de 2019 respecto al mismo periodo del año anterior un 2,8 por ciento, una décima menos que en el primero.

Respecto al trimestre anterior, según los datos publicados por el Instituto de Estadística de Navarra, la variación es del 0,8%, tras el 0,9% estimado en el periodo precedente.

Desde la óptica de la oferta, el crecimiento interanual del PIB del segundo trimestre deriva del dinamismo estimado en los servicios y en las ramas constructoras que cifran el crecimiento en el 3,7% y 3,5% respectivamente, evolución que contrasta con la moderación en la industria y en las ramas primarias, con crecimientos del 1,3% y 0,7% respectivamente.

El Instituto añade que desde la óptica de la demanda, el PIB basa su crecimiento en el dinamismo de la demanda interna, que sitúa la aportación al agregado en 2,4 por ciento.

El gasto en consumo final cifra el crecimiento en el 2,6% debido al mayor dinamismo estimado en el consumo de las administraciones públicas, que compensa en parte la moderación en los hogares, mientras que la formación bruta de capital desacelera el ritmo de avance al 1,9%.

Por su parte, la demanda externa aporta al agregado un 0,4%.

Otros datos del Instituto indican que el empleo ha crecido el 2,6%, dos décimas menos que la tasa alcanzada en el trimestre anterior, lo que unido al avance del PIB hace que la variación de la productividad del factor trabajo se cifre en un 0,1%, repitiendo la tasa alcanzada el periodo precedente.

Además la remuneración por persona asalariada se incrementa en un 1,6% y el coste laboral unitario en el 1,5%, cuatro décimas por encima del deflactor implícito del PIB.

EL CRECIMIENTO MÁS FLOJO EN EL ESTADO EN 5 AÑOS La economía española creció en el segundo trimestre el 0,4 %, una décima menos que en el primero, debido a la debilidad del consumo y la inversión empresarial y pese a la mejora del sector exterior, según ha revisado este lunes el Instituto Nacional de Estadística (INE).

El crecimiento del empleo, medido en puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, se ha incrementado al 0,5 %, una décima menos que en el trimestre anterior.

El crecimiento económico se apoya en el dinamismo del sector exterior, con un aumento de las exportaciones del 1,7 % y un avance de las importaciones del 0,9 %.

Por su parte, la demanda interna creció el 0,1 %, tres décimas menos que en el trimestre anterior, con un comportamiento plano tanto del consumo de los hogares como de la inversión, por la contracción del 1,7 % de la inversión empresarial.

La tasa interanual de crecimiento económico (2 %, dos décimas menos que en el trimestre precedente) refleja el cambio de patrón en la evolución de la economía, ya que la contribución de la demanda externa ha subido de 0,2 a 1 punto, igualando la de la demanda interna, que ha bajado de los 1,9 puntos del trimestre precedente.

Por ramas de actividad, la construcción registró el mayor crecimiento trimestral (0,8 %), seguida del sector servicios (0,5 %) y la industria (0,5 %), si bien la industria manufacturera se mantuvo plana, en tanto que la agricultura moderó su caída al 2,7 %.

En términos interanuales, el empleo creció el 2,5 %, dos décimas menos que en el primer trimestre, lo que supone un incremento de 446.000 puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo en un año.

En comparación interanual, la creación de empleo cayó en la agricultura (1,6 %) y mantuvo el ritmo de crecimiento en los servicios (2,7 %) y la industria (1,4 %), mientras que se redujo a la mitad en la construcción (5 %).

El número de horas efectivamente trabajadas aumentó un 1,3 % anual, 1,2 puntos menos que el trimestre anterior, mientras que la productividad por puesto de trabajo equivalente a tiempo completo cayó el 0,5 %, una décima menos que un trimestre antes, y la productividad por hora efectivamente trabajada creció el 0,7 %, frente a la caída del 0,3 % del trimestre anterior.

El coste laboral unitario creció un 2,8 % respecto al segundo trimestre de 2018, una tasa 1 punto superior a la variación del 1,8 % registrada por el deflactor implícito de la economía -que recoge el efecto de la inflación-.

En lo que respecta a las rentas, la remuneración de los asalariados creció el 5,2 % anual (dos décimas más que en el primer trimestre), en mayor medida por el aumento del número de asalariados (2,7 %), aunque también por la subida de la remuneración media por asalariado (2,4 %).

El excedente de explotación bruto (margen empresarial) se incrementó un 3,3 %, 1,7 puntos más que en el primer trimestre, mientras que la cuantía devengada en impuestos netos sobre la producción y las importaciones creció el 1 %, frente al 4,4 % del trimestre anterior.