- Juan Luis Gómez López, graduado social autónomo y colaborador en la Asesoría Consulting Financiero SL, ha visto incrementado su trabajo de manera exponencial en pocos días; e incide en el "estrés" que soporta su colectivo. "Esto no ha hecho más que empezar", insiste.

Si una empresa ha tenido que cerrar por el estado de alarma y manda a su plantilla a casa sin haber solicitado el ERTE, ¿puede aplicarlo con efecto retroactivo?

-Sí. Los ERTE por fuerza mayor pueden aplicarse con carácter retroactivo a la fecha del hecho causante desde el momento que sean constatados por la autoridad laboral competente. Además, la duración de la regulación se limita a la concurrencia de la fuerza mayor temporal.

¿El compromiso de mantener el empleo durante seis meses por este tipo de ERTE puede prorrogarse por más tiempo?

-En un principio, tienen el compromiso de mantener el empleo durante el plazo de seis meses desde la fecha de reanudación de la actividad, según la disposición adicional sexta del RDL 8/2020, que incluye la salvaguardia para el empleo.

Si no hay negociación entre empresa y representación sindical en un ERTE por fuerza mayor, ¿cómo pueden acordarse mejoras laborales durante la aplicación de este expediente?

-Al no exigirse en el procedimiento un periodo de consultas en el que puede intervenir la parte social, no cabe esta posibilidad. De esta forma, será la empresa quien pueda mejorar las medidas si lo estima conveniente y viable.

¿Conviene unificar criterios de causas en los ERTE, como ha pedido el sector de la automoción y sus proveedores en Navarra, por la actual coyuntura de crisis sanitaria?

-No solamente lo vemos necesario, sino que además, entendemos la gran mayoría de nuestro colectivo que no podemos estar recibiendo todos los días y a todas horas diferentes instrucciones y modificaciones continuas en las normas para la gestión de los distintos procedimientos. Además, hay otros aspectos jurídicos que deben aclararse convenientemente, ya que es fácil decir y pintar todo de color de rosa, pero luego cuando hay que implementar todo lo que se ha contado, aparecen los problemas. Nuestro colectivo está en medio de esta desgraciada guerra: ¿qué pasará si por falta de información o por un defecto de forma, cometemos un error? ¿Quién o quiénes lo vamos a pagar? No podemos estar en esta situación de estrés y de inseguridad.

¿Qué solicita su sector?

-Necesitamos un apoyo desde la administración que sea coherente y sobre todo humano. No somos perfectos y lógicamente ante esta avalancha de expedientes, nos estamos colapsando por querer hacer correctamente todo el procedimiento. Además, entendemos que es necesario actuar así para esas empresas y personas trabajadoras que están pasando por bastantes problemas en estos momentos.

¿Cree que las plantillas reguladas pueden tener retrasos en el cobro de la prestación por paro ante el aluvión de expedientes que requieren de más personal para gestionar el papeleo?

-Es posible y para evitarlo conviene acelerar la aprobación de los ERTE. Esta situación coyuntural nos va a provocar trabajo extra y arduo a las personas y asesorías laborales. Se ha hablado mucho para tranquilizar a las empresas y a las personas ocupadas afectadas, pero el trabajo no ha hecho más que comenzar, está siendo muy costoso y está generando muchísimas dudas a los profesionales que de alguna manera nos dedicamos a las relacione laborales.