- La fundación bancaria Caja Navarra deberá transformarse en los próximos meses en una fundación ordinaria cuyo patronato quedará bajo control del Parlamento de Navarra. Lo anunció ayer Manu Ayerdi, consejero de Desarrollo Económico del Gobierno de Navarra, aprovechando una pregunta de Uxue Barkos acerca de las consecuencias para Navarra de la fusión entre CaixaBank y Bankia.

La absorción, indicó Ayerdi, no tendrá consecuencias relevantes entre la plantilla -cifró el posible excedente en 16 personas- ni debería ser mala "para la cotizaciones de las acciones de CaixaBank", pero sí debería suponer un cambio relevante en la razón jurídica de Fundación Caja Navarra, considerada hasta el momento como una fundación bancaria regida por la Ley de 26/2013 de cajas de ahorros y fundaciones bancarias. Este texto legal establece que aquellas fundaciones que no posean una participación de control de al menos un 10% o que les permita nombrar o destituir a algún miembro del consejo de administración de la entidad, deberán constituirse en fundaciones ordinarias. Según explicó Ayerdi, una vez que se confirme el nuevo consejo de administración de CaixaBank, donde ya no tendrán cabida representantes de las antiguas entidades que componían Banca Cívica, Fundación Caja Navarra deberá constituirse "en un plazo de seis meses", por tanto en 2021, en una fundación de carácter ordinario, que se rija "por la Ley Foral 2/2014".

Esta ley, por la que se regulan los órganos rectores de determinadas fundaciones, refuerza de manera notable el papel del Parlamento de Navarra a la hora de elegir tanto al presidente como a los miembros del patronato. El Pleno del Parlamento sería, según esta norma, el encargado de nombrar al presidente y a cinco miembros del patronato. El Gobierno de Navarra elegiría a otros dos miembros y el pleno del Ayuntamiento de Pamplona elegiría al último miembro. Como sucede en la actualidad, los miembros del patronato no tendrán derecho a retribuciones o dietas.

La portavoz de Geroa Bai, Uxue Barkos, señaló que actualmente la Fundación Can es "el último vestigio de la realidad como entidad financiera que Navarra tuvo en el siglo XX y que ahora puede terminar en esa relación con su propio origen". "Esta posibilidad, desconozco si es más o menos probable, de que desaparezca el carácter de la fundación bancaria entierra definitivamente la historia de Caja Navarra dando paso a una fundación sin vinculación bancaria", explicó Barkos.

De hecho, Caja Navarra comenzó a diluirse definitivamente hace una década, cuando se constituyó el grupo Banca Cívica, incapaz de hacer frente a las exigencias de solvencia impuestas por los reguladores, como sí lograron otras entidades de crédito. Esto llevó a Banca Cívica a ser absorbida por CaixaBank, de tal modo que Caja Navarra pasó a controlar un paquete de acciones de la entidad de crédito catalana cercano al 1% del total. Este porcentaje se fue diluyendo hasta quedarse en el 0,89% que mantiene en la actualidad y que, con la entrada de Bankia, se verá reducido al 0,665%.

Preguntada por el anuncio del Gobierno de Navarra, la fundación optó por lo más parecido a un "sin comentarios" y recordó que "es una fundación bancaria de acuerdo a la ley 26/2013 del 27 de diciembre. La citada ley es la que rige las actuaciones de la fundación que tiene marcada su actuación en los ejes de su plan estratégico: apoyo a las personas más vulnerables, promoción de la solidaridad, la participación y la convivencia, apoyo a la investigación, la educación, la cultura y el patrimonio artístico y garantía de la solvencia institucional, económica y técnica de la fundación.

103

Los 53,6 millones de acciones que Fundación Caja Navarra posee en CaixaBank suponen su gran patrimonio, si bien es cierto que atraviesa horas bajas. Los títulos de CaixaBank cotizaban ayer a 1,92 euros, por lo que su valor de mercado se quedaba en apenas 103 millones de euros.

56%

El dividendo que CaixaBank paga a sus accionistas ha ido descendiendo de manera continua en los últimos años, algo que ha afectado al margen de maniobra de la fundación. Ha pasado de los 16 céntimos por título del año 2014 a los apenas 7 céntimos que pagará este año: un 56% menos.

"Fundación Can es el último vestigio de la entidad financiera que tuvo Navarra"

Portavoz de Geroa Bai