El actual lleva camino de ser un año histórico para las cuentas de resultados de la banca. Para la grande, pero también para la pequeña. Caja Rural de Navarra, la única entidad financiera con sede central en la comunidad, es una prueba de ello. En los seis primeros meses del año ha logrado un beneficio de 93,06 millones de euros, un 72% más que en el mismo periodo del año pasado, un ejercicio en el que ya logró su mejor resultado histórico.

A este paso, Caja Rural de Navarra, dirigida desde hace 43 años por Ignacio Arrieta, pulverizará este año el resultado de 2022, cuando superó los 115 millones de euros. La subida de tipos de interés ha disparado el margen de intereses de la entidad (la diferencia entre lo que cobra por los préstamos y lo que paga por los depósitos): de 73,1 millones en 2022 a 116,87 en el actual ejercicio. Una subida del 60% en su margen principal que se ve acompañada por un leve incremento en los dividendos percibidos y en las comisiones cobradas.

Todo ello deja un margen bruto de 167,8 millones de euros, un 33% por encima del obtenido en 2022, un alza que compensa con creces los muy moderados incrementos en los gastos de administración y personal, tradicionalmente muy contenidos en la entidad. La ratio de eficiencia, mejor cuanto más baja, se queda en un 32,2%, casi siete puntos menos que hace 12 meses. Este dato sitúa a la entidad cooperativa navarra entre las más eficientes y rentables del sector financiero español.

La actualización de las hipotecas se encuentra detrás de unos resultados que se destinarán, como siempre, en engrosar las reservas de la entidad, entre las más capitalizadas. Los ingresos por intereses cobrados prácticamente se doblan (de 80,76 a 157,23 millones), un aumento que ha permitido a la entidad remunerar algo más que la media y durante más tiempo los depósitos de todos los clientes: sus gastos por intereses se multiplican por cinco, pero al partir de una base muy baja (7,57 millones) se quedan en 40,36 millones de euros.

En estos momentos, los fondos propios de la entidad superan los 1.637 millones de euros, de los que 1.287 son reservas procedentes del beneficio acumulado de años anteriores y 240 millones son capital formalizado.