En 1998 Rosalía Echeverría Echeverría pasó de ser la encargada de una conservera a presidir la Asociación de Familias y Mujeres del Medio Rural (Afammer-Navarra). Empezó con una pequeña oficina en casa, equipada con una computadora en una mesa llena de papeles, hasta fundar la sede en Sesma. "Siempre está con un ojo en el ordenador y con el otro en el puchero, para que no se quemen los garbanzos y para que la solicitud de la subvención llegue a tiempo. Así es Rosalía, incansable e incombustible", ha definido su hija antes de que recibiera su madre un reconocimiento por sus compañeras.

250 mujeres rurales, la gran mayoría de ellas veteranas, han asistido en el salón de actos del Planetario de Pamplona a la celebración de los 25 años de este colectivo. "Dos de cada tres personas que se marchan del pueblo a la ciudad son mujeres. Demandamos un pacto global que rompa desigualdades, incentive el empleo en el mundo rural, apruebe medidas fiscales para pagar menos impuestos al carecer de servicios y feminizar el campo con mujeres tituladas universitarias", ha manifestado Carmen Quintanilla, presidenta de Afammer en España.

La violencia de género

Más de 2.500 socias forman parte de esta asociación en Navarra, que ha contribuido a impulsar la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres en el mundo rural y ha luchado por visibilizar que las mujeres tengan el papel correspondiente en el desarrollo económico, social y sostenible de los pueblos. Por todo ello recibieron en 2021 el premio Berdinna, como así ha valorado la propia Rosalía. Con un ejemplo, la presidenta de Afammer-Navarra ha recordado esa evolución: "Hace 20 años, organizamos una charla en un pueblo para abordar la violencia de género, y las que asistieron temían que les señalaran por acudir a esta iniciativa. Dos décadas después, nos manifestamos el 25-N y nos hemos concienciado de que no es un problema interno sino social".

En esta línea, Patricia Abad, directora gerente del Instituto Navarro para la Igualdad, ha afirmado que la estadística establece que "el porcentaje de denuncia de violencia de género es menor en el mundo rural que en el urbano al estar invisibilizada por el temor al qué dirán, al tratarse de municipios pequeños en el que todos se conocen". Abad ha recordado que "Navarra dispone de equipos especializados que atienden a los territorios" y que hay que seguir insistiendo en esta cuestión.

"Sin pan los domingos"

Rosalía Echeverría también ha insistido en la importancia de los servicios en estas zonas. "Demandamos transporte, hay pueblos que han dejado de llevar el pan los domingos y muchos otros carecen de farmacia o de médico. Están desangelados", ha reiterado. La alcaldesa de Pamplona, Cristina Ibarrola, como médica de atención primaria que es, ha reivindicado "el empoderamiento del facultativo rural para hacer atractivas estas plazas, ya que no solo basta el tema económico".

"Somos el pilar para asentar población"

Rosalía Echeverría ha resaltado que la mujer es "el pilar para asentar la población en el mundo rural". En relación a esta cuestión, Patricia Abad ha anunciado que "desde hace año y medio, el Instituto trabaja para materializar en forma de normativa un estatuto para las mujeres rurales de Navarra que aporte herramientas de empoderamiento para disminuir las desigualdades y reducir las diferentes brechas de género". Ha valorado la implicación de este tipo de asociaciones en el territorio porque aportan su visión al Gobierno de Navarra en el desarrollo de las políticas públicas en este ámbito.

Carmen Quintanilla, de Ciudad Real y diputada por el PP entre 2000 y 2019, ha valorado la aportación de esta asociación, que a nivel nacional suma 41 años de trayectoria y que está presente en 15 organismos internacionales: "Hemos puesto de moda ser de pueblo. Hemos visibilizado a la mujer y hemos suprimido el estigma de pertenecer al mundo rural". Para ello, ha ofrecido una serie de datos: "Las mujeres gestionan el 67% de las casas rurales y un 54% de féminas son autónomas en España". En cambio, ha considerado "una tragedia" que dos de cada tres personas que dejan los pueblos son mujeres en una despoblación que avanza en el Estado y en Europa Central. "Somos la España donante, la que alimenta el mundo y la que mantiene la soberanía alimentaria y la biodiversidad. Somos el futuro", ha concluido Quintanilla.

Durante este encuentro conmemorativo, Afammer ha hecho entrega de la 16ª edición de los Premios Mujer Rural de Navarra, con motivo del Día Internacional de las Mujeres Rurales.

La casa de las mujeres de Pamplona y de Burlada

Han recibido reconocimiento La casa de las mujeres de Pamplona y La casa de las mujeres de Burlada. María Malo y Carmen Chamorro han recogido las distinciones, respectivamente. Ambos centros han sido calificados como "referentes feministas, interseccionales e intergeneracionales, donde llevar a cabo actuaciones y actividades para lograr el empoderamiento individual y colectivo de las mujeres".

En el ámbito de asociaciones y entidades privadas ha recibido el galardón la Asociación de Mujeres Periodistas de Navarra por "trabajar por una comunicación más feminista y comprometida". Para ello, ha salido al escenario Candelas Elías.

Afammer ha sorprendido a Clotilde García García al distinguirla por su "lucha para defender los derechos de las mujeres y para que esta sociedad sea más igualitaria y erradique la violencia hacia las mujeres".

Un año especial: una "Encina" por el trabajo realizado

Esta asociación ha aprovechado el 25º aniversario para galardonar con su logotipo, la Encina, a cuatro personas: a Esteban Andrés Soto, a Emilia Salvatierra San Miguel, a Julia Expósito Camacho y al voluntariado.