Con 15 años conseguí mi primer trabajo en Mercairuña. Un día le dije al empresario que no me gustaba que me explotaran y me despidió porque me justificó que no quería sindicalistas. Me marché orgulloso de que me considerara un sindicalista, aunque no me hizo tanta gracia cuando me di cuenta de que debía pagar la letra de la moto”, relata Lorenzo Ríos, el nuevo secretario general de UGT en Navarra. Tiene tres hermanas, Itsaso, Arantxa y Susana, y es el segundo en el escalafón; y está casado con Roseli Castelhano, con la que tiene una hija de 23 años, Mar.

Hace 35 años, Ríos se afilió cuando comenzó su andadura en VW Navarra –donde trabajaba su padre Benito, recientemente fallecido–. “Él me inculcó mis ideales. Cogía libros de su biblioteca para leer en el colegio sobre la lucha política de los trabajadores. Me marcaron mucho, sobre todo uno de José Luis Llorens que escribía sobre las condiciones de vida de las familias obreras de inicios del siglo XX, sus jornadas interminables, la precariedad o la insalubridad. Tras conocer esas miserias, yo sabía que quería ser sindicalista”, recuerda a sus 53 años. En su etapa en la factoría de coches, con 19 años, leía el nuevo estatuto de los trabajadores “entre coche y coche”, y a esa edad formó parte de la sección sindical de UGT en VW Navarra. 

“No me decepcionó el 52%, porque para mí era más importante formar una buena ejecutiva, aunque algunos no lo hayan comprendido”

Ejerció de delegado comarcal en Estella (1995-1999). “Coincidí con históricos que habían vivido la reconversión industrial como Andrés de Miguel, Pedro Mecoleta y Jorge Ugarte, de los que aprendí mucho y fueron referentes en mi desarrollo sindical”, subraya. Pasados esos cuatro años regresó a la federación de Metal, Construcción y Afines (MCA), dirigida por Patxi San Juan, y en 2006 se presentó como candidato de esta federación que posteriormente pasó a denominarse FICA (Industria, Construcción y Agro). Durante casi 20 años ha liderado la mayor federación de UGT, con casi 9.000 afiliados, el 60% del total. “En la crisis de 2008, trabajamos para que las empresas invirtieran para prepararse para el futuro; promovimos elecciones para crecer en las empresas; y a través de la concertación en la negociación colectiva frenamos recortes de la reforma laboral”, resume. Hasta el 28 de marzo va a ostentar el cargo de secretario general de UGT y el de FICA, ya que ese día se celebra el congreso para que 120 delegados voten a su relevo al frente de la mayor federación del sindicato. 

¿Por qué da el paso a ocupar la secretaría general de la UGT?

Vi que había que asumir esa responsabilidad y consulté con compañeros, secciones sindicales, mi ejecutiva, la organización y secretario general confederal. Después de que se transmitiera que era la persona adecuada y de consenso, con ilusión pensé que era el momento de contribuir más allá de la negociación colectiva, para defender el estado de bienestar y los servicios públicos de calidad. 

Pero sale elegido usted y su ejecutiva con el 52,48% de apoyos. ¿Qué ocurrió?

Somos una organización democrática y eso es la grandeza del sindicato. Cada delegado tiene su voto. Para mí supone un aliciente. Siempre he tenido claro que la unidad del sindicato resulta esencial para multiplicar nuestra presencia fuera. Acepto democráticamente el resultado, y tenía claro qué equipo quería para gestionar los desafíos del futuro. Personas que combinan experiencia y juventud y que cuentan con la especialización y transversalidad necesaria: cuatro proceden de FICA y dos de Servicios Públicos. Es una ejecutiva paritaria. 

¿Le decepcionó el resultado?

He vivido en mi trayectoria sindical muchos procesos congresuales, y tengo las ideas muy claras. Tenía la obligación de presentar al congreso la mejor alternativa aunque eso pueda suponer que no todo el mundo lo haya comprendido. Diseñé la mejor ejecutiva para responder a la transición ecológica y digital; a la expansión de las políticas sociales; a los problemas de la juventud y sénior; y a la modernización y mejora de la organización del sindicato con las nuevas tecnologías. Asumo el resultado, y no le he dado muchas vueltas. Tengo la experiencia, capacidad e ilusión de llevar a mi sindicato hacia el futuro y de defender desde la organización, los derechos de los trabajadores.

“Pedro Carvajal es un compañero ‘pata negra’ y he trabajado con él codo con codo; y Mikel Bezunartea es una persona valiosa”

¿Pero le decepcionó?

No, porque por encima de mí está el interés del sindicato. Para mí es más importante haber hecho lo correcto, es decir, presentar un buen equipo, aunque haya supuesto que haya personas que no lo han comprendido. Estoy convencido de que esta ejecutiva va a contar con el respaldo de la organización y tengo por delante tiempo para demostrarlo.

¿De qué manera va a hacer cambiar de opinión al 47,52% de delegados que votaron en blanco?

Escuchando, respetando a las federaciones que hacen una labor importante en el sindicato y haciendo una buena gestión para trabajadores y trabajadoras en un contexto acelerado de cambios: impulsar la negociación colectiva y una nueva política industrial, y trabajar por unos servicios públicos de calidad y condiciones dignas para los empleados, etc. La herramienta para todo esto es el Diálogo Social.

El Congreso de FICA es el 28 de marzo, con dos candidatos: Pedro Carvajal y Mikel Bezunartea, ¿cómo afronta ese relevo?

Somos una organización democrática y estoy convencido de que mis compañeros y compañeras sabrán elegir.

Si Pedro Carvajal lleva años trabajando en la Federación con usted. ¿Cree que las bases considerarán que es el candidato de Lorenzo Ríos?

Pedro Carvajal me ha demostrado ser una persona que ha defendido a los trabajadores en momentos muy difíciles, con muy buenos valores y experimentado. Es un compañero pata negra, como decimos en la UGT, una persona con la que todos se sienten a gusto trabajando. Con esto no quiero desmerecer a nadie. 

¿Qué puede decir de Bezunartea?

Es una persona valiosa, y ha hecho una buena labor sindical en su empresa, con once delegados de 13. Pero conozco más a Carvajal, ya que he trabajado con él codo a codo en estos casi 20 años. 

¿Qué ocurre si es elegido secretario general de FICA Mikel Bezunartea?

La Federación tendría una alternativa para los próximos cuatro años.

Bezunartea sonó como posible candidato a la secretaría general de la Unión, pero no dio el paso. ¿Cree que el apoyo del 52,48% del Congreso puede venir de aquellos que querían a este candidato?

Pienso que no. Personal y sindicalmente, siempre me ha gustado trabajar con Mikel Bezunartea, y hemos compartido momentos importantes de la negociación colectiva de su empresa para defender los intereses de los trabajadores cada uno desde nuestras responsabilidades.

“Queremos una UGT estrecha por arriba y que se ensanche en las bases para llegar a más empresas”

¿Es una alternativa de consenso unificar las dos candidaturas?

Será algo que tendrá que tratarse en el ámbito del congreso.

Santos deja UGT como primera fuerza sindical en Navarra, ¿qué va a hacer para conservar ese puesto?

Mediante una organización cercana y ágil que responda con celeridad a los problemas de los trabajadores. Queremos una UGT estrecha por arriba y que se ensanche por abajo, en las empresas y en actividades estratégicas. El 98% de empleados en algunos sectores se concentran en pymes, y en estos centros el sindicato debe actuar de contrapeso. Vamos a potenciar la negociación colectiva; vamos a trabajar por lograr una mayor presencia en las empresas y a establecer nuevas formas de organización para mejorar la comunicación con los trabajadores. También vamos a seguir defendiendo los servicios públicos, las pensiones justas y el acceso a la vivienda como derecho. Esto diferencia a UGT de otros sindicatos, ya que salvaguarda al trabajador por su carácter socio-político.

El presidente de la CEN, Manuel Piquer, pidió a su secretario general confederal, Pepe Álvarez, más apoyo frente a ELA y LAB. ¿Por qué, si UGT es el primer sindicato?

UGT es un sindicato internacionalista, con un modelo basado en la concertación. Sabe que empresas y trabajadores constituyen un binomio para actuar en el mismo marco jurídico y político. En determinados contextos, en mi organización hay compañeros y compañeras, con formación permanente y una visión global de la importancia de la industria, que han defendido los intereses de trabajadores de su entorno frente a multinacionales. Esto ha llevado a buscar el rearme industrial en determinados momentos, defender la empresa como bien social, y a veces se ha hecho tomando decisiones difíciles, aunque nuestro objetivo prioritario siempre es proteger el empleo. Por eso, a veces, mis delegados y delegadas sufren desgastes, porque otros se dedican a anteponer los intereses políticos al de los trabajadores. Una postura, esta última, que yo respeto; pero son posiciones sindicales que no piensan en el largo plazo y no aceptan los planteamientos de UGT. Por eso, pedimos el mismo respeto que nosotros tenemos hacia ellos. 

¿Piquer se refería a ese desgaste?

Entiendo que sí, pero debería preguntarle a él. Sí que es verdad que nuestra confederación sindical de UGT ha reforzado el sindicato en Navarra por esa diversidad a cinco o a seis centrales diferentes.

¿Sus socios de viaje en negociaciones son CEN y CCOO?

Por un lado, está la representación sindical que está regulada por ley; y por otro lado, el ámbito del Diálogo Social nos parece un instrumento fundamental para que los trabajadores avancen en la sociedad, y ahí está CCOO y la CEN. 

¿Qué objetivos prioritarios se propone para estos cuatro años?

Un sindicato más influyente en los sectores, con más afiliados y presencia en las empresas, y adaptado al siglo XXI con la digitalización de los servicios, mejorar la comunicación con la militancia y ofrecer más formación y asesoramiento. Una defensa del empleo de calidad, es decir, no solo aprobar la reforma laboral sino hacer que se cumpla. Avanzar en la negociación colectiva con salarios dignos y acabar con la temporalidad abusiva. Fomentar la reducción de la jornada sin pérdida de salarios y promover el derecho a la conciliación; e intensificar la lucha contra la economía sumergida. 

¿En materia de vivienda?

Acceso digno a una vivienda, con políticas de alquiler justas, ampliar el parque público de vivienda, rehabilitación con criterios de sostenibilidad beneficiando a las personas con menos recursos, e impulsar planes de vivienda para jóvenes y colectivos vulnerables. 

¿Y qué medidas para jóvenes y para otras cuestiones?

Estabilidad laboral para los jóvenes, con prácticas y becas remuneradas y reguladas. Igualdad y conciliación, y combatir la brecha salarial, con auditorías en las empresas. Además, exigimos un sistema público de cuidados. El derecho a la jubilación anticipada en profesiones con desgaste físico y emocional. Defendemos los servicios públicos y un sistema de pensiones sólido, suficiente y a largo plazo. Exigimos una transición ecológica justa que garantice reconversión de sectores sin pérdida de empleo. Esencial la formación de trabajadores y acreditación de competencias para usar en los sectores emergentes; pedimos la electrificación del transporte público; y reducir la huella de carbono en la industria.

¿Hay conexión entre la juventud y el sindicato?

Detecto que hay más jóvenes que se incorporan al sindicato, aunque acceden más tarde al mercado laboral. Hay que explicar a la juventud que los sindicatos son una herramienta de transformación social que defienden la sanidad, la educación, el derecho a la vivienda y las políticas sociales. Los jóvenes van a tener que organizarse para mantener y expandir estos derechos. Vamos a promover el sindicato entre los jóvenes para asegurar la justicia social.

¿El individualismo es el enemigo de los sindicatos?

Sí, porque el individualismo se convierte en la ley del más fuerte. Las nuevas generaciones no deben dar por sentado que los derechos adquiridos se van a mantener. En estos momentos, el mundo vive una tendencia hacia la individualización y pérdida de valores solidarios. Los Estados deben garantizar la cohesión social y la redistribución de la riqueza mediante la negociación colectiva y los impuestos donde los que más tienen deben aportar más para quienes menos recursos acumulan, y así disminuir las desigualdades.

¿Qué postura adopta UGT ante la actual revolución industrial?

En España a la Ley de Industria se le ha añadido el concepto de Autonomía Estratégica, algo clave. Defendemos la concentración de la cadena de valor para evitar estrangulamientos de suministro. Todos los gobiernos, ministerios y consejerías deberían pensar con qué pueden contribuir a la industria –infraestructuras, incentivos a las inversiones productivas, formación desde la educación–. Debe haber una política industrial efectiva y coordina. Es una oportunidad histórica disponer de una ley de industria en España y en Navarra.

De las medidas que propone UGT, ¿cuál destaca?

Las multinacionales que reciban ayudas públicas y se vayan, tendrán que devolver hasta el último céntimo por ley. Las empresas deben tener responsabilidad social porque reciben dinero de los impuestos de todos.

Hay empresas en Navarra que están pasando por momentos delicados, ¿alguna novedad en Sunsundegui?

En breve vamos a conocer una alternativa de continuidad.

¿Y de BSH?

En 1982 esta planta también sufrió un capítulo semejante por la reconversión industrial. Vamos a trabajar por buscar productos de futuro para BSH, es algo que nos preocupa y ocupa. No vamos a desistir e intentaremos lograr un futuro industrial para una factoría de la que dependen muchas personas.

La presidenta María Chivite anunció un programa de inversión público-privado, ¿qué opina?

Nos gusta que la presidenta lleve mucho tiempo poniendo a la industria en el centro del debate político. Nos gusta esa anticipación para asegurar el futuro de este sector. UGT lleva años diciendo que la industria es fundamental y que debe estar en el eje de todas las políticas.

¿Qué nuevos sectores industriales puede desarrollar Navarra?

La UE y España están invirtiendo en materia de desarrollo tecnológico, seguridad y defensa. Solo en el Estado, 40.000 millones. Navarra debe aprovechar su ubicación estratégica para implantar este tipo de sectores emergentes que fijen población por medio de la reindustrialización. 

¿Habla de un sector militar, armas?

No tiene por qué. Este sector es muy amplio. Tenemos una empresa emblemática como MTorres que ha aportado conocimiento al sector de la seguridad.

¿Qué otros sectores ven incipientes?

Desarrollo tecnológico, biofarmacéutico y actividades que despuntan con la inteligencia artificial.

Hace una semana Jesús Santos indicó la necesidad de más dinero en el nuevo Plan de Empleo, ¿Coincide?

Debo verlo con más detenimiento. Los planes de empleo a largo plazo trazan las líneas maestras, y a veces hay que tomar medidas anticíclicas, con aportaciones presupuestarias. En un contexto como el actual, este plan debe ser flexible, ágil y anticipador. 

Siniestralidad laboral, ¿por qué Navarra tienen tan malos datos?

La filosofía de la ley de prevención es actuar antes de que se produzca el riesgo. Navarra fue por delante porque hubo una apuesta de inversión pública, con delegados territoriales de prevención. Pero, hemos empezado a ver barbaridades en el sector de la construcción, por ejemplo. Consideramos que hay que destinar más recursos públicos para la labor de vigilancia.

Ríos, durante un momento de la entrevista. Patxi Cascante

¿Y eso en qué se traduce?

Más inspección de trabajo para vigilar si se cumplen las normas de seguridad, sin afán recaudatorio; más formación para los trabajadores; e insistir en la cultura preventiva e información de riesgos entre los migrantes, entre otras medidas. 

¿Qué grado de culpa tienen los sindicatos en esto?

La Administración debe poner más recursos para que los sindicatos formen a los delegados de prevención y para elaborar mapas de riesgos y planes de actuación efectivos. A veces, los empresarios parece que quieren cumplir un trámite administrativo, y lo que deben hacer es invertir realmente en prevención porque lo más importante son los trabajadores.

¿Qué peso tiene la migración en la afiliación de UGT?

Como somos un reflejo de la evolución social, van incorporándose tanto en afiliación como en delegados.

¿Con qué color de Gobierno en Navarra se siente más cómodo al negociar?

Los trabajadores mejoran su posición con gobiernos progresistas que desarrollan políticas sociales y es ahí donde más cómodo se siente un sindicalista. Me ha tocado negociar con todo tipo de gobiernos. Somos respetuosos con todos, pero nos interesan los gobiernos progresistas.

Traducido en siglas, ¿el PSN?

El Partido Socialista, históricamente, se ha comprometido con los derechos laborales y sociales de los trabajadores. Soy militante socialista desde hace 33 años.

¿Algo que añadir a la entrevista?

UGT pide a nivel estatal una ley de participación institucional y de negociación colectiva para que nos destinen recursos económicos por nuestra labor institucional y en la negociaciones colectiva, de la que no solo se benefician nuestros afiliados sino que todos los trabajadores.