Los trabajadores de las villavesas han acordado hoy continuar la huelga en una votación muy ajustada. El 50,6% de la plantilla rechaza la última propuesta de la empresa lo que significa continuar con los paros ocho meses después. Solo seis votaron separaron a los detractores de los partidarios del acuerdo. Así de 450 participantes en la votación (el 80% de la plantilla ya que son un total de 564), 228 (el 50,6%) no apoyaron la última propuesta de la empresa frente a los 222 (el 49,4%) respaldarla. El comité de empresa ha anunciado que el lunes hará una valoración más reposada de la asamblea.
Por su parte, desde la dirección de la empresa lamentan el resultado y aseguran que no van a negociar mientras no se desconvoquen los paros. Por ahora, el comité mantiene los paros parciales para este lunes 13 y miércoles 15, entre las 6.00 y 8.30 horas.
Este viernes más de 500 trabajadores y trabajadoras de Moventis TCC, empresa que gestiona el transporte urbano comarcal, están llamados a votar la última propuesta de convenio. En los dos primeros turnos, el 60% de la plantilla ya había ejercido su derecho al voto, según fuentes sindicales. La última franja horaria para votar se ha fijado entre las 21.00 y 23.30 horas.
La mayoría del comité, diez delegados de UGT y cuatro de CCOO, ha defendido someter a votación el documento, después de que así decidiera su afiliación. En cambio, los otros tres sindicatos con representación social, tres de ELA, dos de LAB y dos de ATTU, han insistido en rechazar los planteamientos de la empresa y continuar con la lucha mediante la movilización –los paros parciales–.
Las mejoras
El planteamiento de la empresa incluye: un incremento salarial vinculado al IPC general; abono de los atrasos desde la finalización del anterior convenio; aumento de los pluses festivo y nocturno; mejora de las prestaciones por contingencias comunes; un cuarto día de asuntos propios en 2026 y un quinto día adicional en 2029 que comenzará a disfrutarse el 1 de enero de ese año, con una reducción de la jornada anual a 1.658 horas; avances en los calendarios laborales; y ampliar la vigencia del convenio hasta finales de 2029.
Desde febrero
La plantilla de Moventis TCC ha protagonizado el conflicto laboral más largo de este 2025, debido a la negociación de un convenio colectivo.
Hace dos años expiró la vigencia del convenio, y a través de la ultraactividad han mantenido sus condiciones laborales a la espera de su renovación. Sin embargo, en febrero todo el comité, UGT, CCOO, ELA, LAB y ATTU, anunció el inicio de paros parciales en las villavesas para defender condiciones laborales dignas. A finales de junio hubo intercambio de propuestas entre ambas partes, pero los sindicatos, respaldados por la plantilla, decidieron iniciar una huelga indefinida que afectó a los Sanfermines.
El 14 de julio la plantilla votó si continuar o hacer un paréntesis en las movilizaciones hasta septiembre. Escogieron la segunda opción. Así, UGT y CCOO promovieron una reunión de mediación en el Tribunal Laboral con la empresa, pero la propuesta presentada por la dirección no se aceptó –sin pasar por sufragio– y comenzaron paros parciales, de entre las 6.00 y 8.30 horas, durante diez jornadas. Esta semana había programados otros dos días de huelga –miércoles y viernes–, pero UGT y CCOO los suspendieron con motivo de las asambleas con la afiliación y posterior votación para la plantilla.
Con tres delegados
ELA ha difundido este viernes una nota en la que ha señalado que TCC “niega mejoras básicas” y ha rechazado su “actitud inmovilista”. Ha asegurado que, “entre las principales demandas, ha negado reducir la jornada laboral anual a 215 días de trabajo máximo, limitar las jornadas con un máximo de nueve horas y un mínimo de cinco, y descansos durante la jornada laboral”, etc.
El sindicato ha criticado que la empresa también ha rechazado "una cadencia de descansos igual para toda la plantilla: trabajar dos fines de semana y descansar los dos siguientes, durante todo el año". Igualmente, ha afirmado que la dirección no ha atendido las demandas de "contratación a jornada completa, plus nocturno de 10 euro/hora entre las 22 y las 6, recuperación salarial del 5,38%, y mejora de la redacción del convenio, eliminando coletillas y ambigüedades". "Estas propuestas no son excesivas, sino necesarias para mejorar el trabajo y garantizar la salud y la conciliación de la plantilla, lo cual repercute en la mejora del servicio público", ha afirmado ELA, que ha exigido a TCC que "abandone su postura inmovilista y apueste por una mejora real de las condiciones de trabajo".
800.000 viajes perdidos
Durante el conflicto laboral, el transporte urbano comarcal ha perdido 800.000 viajes, que representan el 2,6% del total en estos ocho meses, según los datos de la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona. En septiembre, el organismo presidido por David Campión estableció servicios mínimos del 60% en los paros parciales, que afectaron a miles de viajeros que en esa franja horaria utilizan el transporte urbano comarcal. Los usuarios han soportado retrasos y vehículos llenos, motivos que han llevado a otros a optar por otros medios para desplazarse.
Moventis habla de "juego sucio"
La Dirección de Moventis TCC remitió ayer un comunicado en el que "lamenta profundamente el resultado de la votación celebrada hoy, en la que la plantilla ha rechazado el principio de acuerdo alcanzado con los sindicatos mayoritarios".
Este resultado supone, agregan, "un golpe a las esperanzas de avanzar hacia una solución justa y equilibrada, tras meses de esfuerzo y diálogo. La compañía expresa su decepción y tristeza , no solo por el bloqueo que se mantiene, sino especialmente por las consecuencias que esta situación tiene sobre la ciudadanía, principal perjudicada de un conflicto que parecía encaminarse hacia su resolución".
"Resulta aún más preocupante que este desenlace haya estado marcado por el juego sucio y las maniobras de un sector del Comité, que ha optado por obstaculizar cualquier avance, desvirtuando el proceso y sembrando división en lugar de construir consenso. Este comportamiento, alejado del sentido de responsabilidad que exige el momento, no solo perjudica a la empresa, sino también al conjunto de trabajadores, muchos de los cuales no quieren continuar en esta situación, y a los miles de usuarios que cada día dependen del servicio público de transporte. Ante esta situación, y ante la evidente falta de voluntad real de alcanzar acuerdos, la empresa fiel a su manera de actuar, no retomará ninguna conversación mientras persistan las actuales dinámicas de bloqueo y mientras no se desconvoquen los paros", subraya.
La compañía reitera su compromiso con "el diálogo social, la calidad del servicio público y el respeto hacia su plantilla, y confía en que, más pronto que tarde, prevalezca la responsabilidad colectiva y el sentido común para recuperar el camino del acuerdo y de la normalidad".
CCOO: "Respetamos la voluntad de la plantilla"
En una nota difundida este sábado, CCOO "acepta el resultado de la votación, respeta la voluntad de la plantilla y seguirá a su lado en los próximos pasos a dar".
“En ningún momento hemos intentado convencer de nada, ni hemos pedido el voto favorable o desfavorable hacia la última propuesta de la empresa, que simplemente la expusimos para que la plantilla pudiera conocer de primera mano lo ofertado por la dirección y decidir sobre su futuro laboral, como así ha hecho”, han destacado en el comunicado.
Este sindicato, con cuatro delegados en Moventis TCC, celebró el pasado miércoles una asamblea con su afiliación que respaldó por amplia mayoría que se celebrase un referéndum para votar. “No hay nada más democrático que una votación donde la plantilla puede expresar su voluntad”, han señalado los representantes del sindicato en la compañía.
Por otro lado, Alberto Longás (UGT), presidente del comité, ha señalado este sábado a Europa Press que "ya hay división de opiniones entre los sindicatos". "Nosotros entendíamos que era la plantilla la que tenía que decidir libremente. Era una propuesta que estaba encima de la mesa, que mejora condiciones", ha criticado.
Reunión este lunes
Así pues, ha avanzado que el próximo lunes se celebrará una reunión extraordinaria del comité de empresa para "valorar la postura de cada sindicato y ver hacia dónde se va". "Es muy importante que cada central ponga encima de la mesa cuáles son los objetivos que tiene, cuáles son esos mínimos con los que van a firmar" ya que "parece que se está hablando de intentar buscar una gestión pública", ha subrayado.