Trabajar en IPES ha sido un punto de inflexión en mi vida, me he nutrido de los saberes de muchas de las personas que han pasado por IPES, en especial del grupo de mujeres del Departamento de Estudios de las Mujeres. Ellas han aportado a mi vida personal y profesional su experiencia, militancia y trabajo de muchos años. Estar rodeada de ellas sigue siendo importante y, sobre todo, motivador.
El movimiento feminista ha impulsado cambios sociales, políticos y culturales importantes y pocas veces reconocidos. Los avances gracias al movimiento feminista han sido un logro no sólo para las mujeres, sino para la humanidad. De estos grandes cambios sociales de las últimas décadas podemos destacar el reconocimiento de la igualdad de derechos de hombres y mujeres en la ley, poniendo en la agenda pública los derechos de las mujeres reconociéndolos como parte de los derechos humanos, la crisis de la familia patriarcal, la incorporación masiva de las mujeres a la enseñanza superior y al empleo, los derechos sexuales y los derechos reproductivos y el acceso de las mujeres al ámbito público.
El trabajo de IPES ha acompañado con sensibilización, formación e investigación estos grandes cambios.
IPES nace en 1976 de la mano de profesionales de las Ciencias Humanas y Sociales –en un contexto de sequía cultural en Navarra– para cubrir un vacío en plena transición. En 1979 surge el Departamento de Estudios de las Mujeres de IPES con la idea de crear un espacio de estudio, difusión y debate de los temas relacionados con la situación de las mujeres y las aportaciones teóricas del feminismo.
La historia del Departamento ha formado parte de la historia del movimiento feminista. En este contexto surge el Centro de Documentación–Biblioteca de Mujeres, inaugurado el 8 de marzo de 1985. Hoy este fondo cuenta con más de 18.400 registros.
A través del cine, también hemos aportado una mirada crítica a la ciudadanía. Así, en 1987 tuvo lugar la primera Muestra Internacional de Cine y Mujeres –la muestra más antigua del Estado–. Más tarde, en 2005, se inició la Muestra de Cine, El Mundo y los Derechos Humanos. Ambas siguen siendo muy necesarias hoy.
Muy ligado al trabajo formación, documentación ha estado nuestra trayectoria en investigación con perspectiva de género. En 1984 realizamos el primer estudio que se hizo en España sobre “Delitos contra la Mujer: Agresión, violación y malos tratos”. En 1986 “Prostitución en Navarra”; “Abandono y malos tratos” y “Madres Solteras, embarazos no deseados”. En 1992 realizamos el estudio “Situación social de las mujeres en Navarra. Evolución 1975-1991“ publicado por Gobierno de Navarra en 1995, pero han sido muchas las investigaciones realizadas desde entonces.
Nuestra aportación ha sido y es fomentar el pensamiento crítico y la educación en valores de igualdad, justicia y dignidad. Hemos desarrollado un espacio para la reflexión y el intercambio de ideas en torno a los problemas del mundo actual y hemos destacado por el trabajo en el campo de los Estudios de Género y en Derechos Humanos; y lo hemos conseguido a través de cursos, proyectos y actividades culturales, entre las que destacamos el Centro de Documentación-Biblioteca de Mujeres, las muestras de Cine y la Escuela de Feminismos, formación especializada que impartimos desde 2006.
Todo este trabajo fue reconocido en 2011 con el Premio “Sociedad y Valores Humanos” del Colegio de Sociología y Politología de Navarra. Actualmente, seguimos siendo un espacio de encuentro, de formación, de documentación, de investigación y de difusión cultural desde una mirada crítica con el mundo actual.
Entrando en los hitos que marcan los avances en igualdad en la sociedad navarra en 2023, destacamos dos. El primero, que la Universidad Pública de Navarra ha dado un nuevo paso por la igualdad con el Máster en Género, Mujeres e Igualdad. Este nuevo título llega después de más de 25 años de desarrollo de los estudios de género en la Universidad que se iniciaron por la colaboración que se realizó entre el Departamento de Trabajo Social de la UPNA e IPES.
El segundo hito a destacar es la puesta en marcha en noviembre de este año de la Cátedra de Estudios de Género y Feminista por parte de Gobierno de Navarra y la UPNA. Es importante promover la investigación y la interlocución con la sociedad en la lucha contra la desigualdad entre hombres y mujeres, consolidar los estudios de género y feministas en los ámbitos de la docencia e investigación.
Esta trayectoria no está exenta de grandes retos que, en definitiva, implican no retroceder en ninguno de los derechos conseguidos hasta ahora, sobre todo en un contexto marcado por el ascenso de fuerzas conservadoras, pero también de mayor fuerza del movimiento feminista como lo demostró la huelga del 8 de marzo de 2018.
Debemos seguir formando a las generaciones más jóvenes, haciendo prevención frente a la violencia de género y sus nuevas formas como la ciberviolencia, facilitando que logren relaciones más libres e igualitarias, así como garantizar el respeto del derecho al cuerpo de las mujeres y a su sexualidad, sin acosos ni agresiones, y dejar de responsabilizar a las mujeres de la violencia sexual que se ejerce sobre ellas, poniendo el foco en los hombres que ejercen la violencia; reconocer la diversidad de cuerpos, las distintas identidades sexuales y de género.
Seguir dando pasos desde el feminismo implica una reorganización social de los cuidados y poner como eje central de la economía el cuidado y sostenimiento de la vida y no el beneficio económico; algo que implica también el desarrollo de un sistema público y comunitario de cuidados y que los hombres asuman la responsabilidad que les corresponde.
La construcción de la igualdad es ilusionante y debemos avanzar para construir nuevas relaciones basadas en la construcción de nuevas identidades que dejen a un lado las relaciones de poder, las jerarquías, las desigualdades y las violencias.
Mirando hacia atrás vemos el avance en derechos como sociedad, debemos seguir mirando, pero ahora hacia delante, sin olvidar de dónde venimos y cómo lo hemos hecho.
