El Aspil-Jumpers Ribera Navarra tiene el sábado una final. El equipo de Diego Ríos recibe mañana (20.00 horas) al Manzanares, rival directo en la lucha por la permanencia.

Aspil y Manzanares tienen en común dos realidades: ambos poseen 23 puntos y están en el límite del descenso, marcados por el Córdoba (20 puntos). Quien gane este duelo, abrirá brecha para dejar al otro en la cuerda floja.

Los riberos llegan al partido con una racha de ocho jornadas sin conocer la victoria (dos empates y seis derrotas). La última vez que los navarros sumaron de tres fue el 21 de enero contra el Valdepeñas (6-4), dinámica negativa que intentarán cortar de raíz mañana en Tudela.

Por otro lado, el Manzanares llega al choque después de derrotar al Levante en la pasada jornada (4-3) y suman dos victorias en los últimos cinco partidos.

La última cita entre ambos se saldó con un empate (2-2) en noviembre, pero esta vez el resultado será crítico para ambos equipos, que buscan una victoria que les aleje del fondo a falta de cinco jornadas.