Estimado presidente Sr. Del Amo: quiero en primer lugar felicitarle en la parte que le toca, por el éxito alcanzado en el pasado mundial de Australia y Nueva Zelanda, donde el equipo nacional logró alzarse como campeón del mundo.

De igual forma, hago extensiva mi felicitación a las personas que desde nuestra Federación han contribuido en la consecución de este éxito, Javier López Vallejo y Javier Lerga Garayoa desde el área técnica y también de igual manera a Julen Itxaso Guillén por el Campeonato de Europa Sub-19 Femenino conquistado en tierras belgas el pasado mes de julio.

No obstante, y pese a este éxito, tengo que lamentar que desde la Federación Navarra de Fútbol no seamos capaces de hacer llegar a las diferentes selecciones nacionales, jugadoras y entrenadoras que nos representen, que sirvan de referente para las jugadoras y entrenadoras navarras y para todas aquellas niñas que ahora mismo estén pensando en si el fútbol es su deporte.

El motivo de esta carta es hacerme eco de los tristes y lamentables hechos ocurridos durante la ceremonia de entrega de trofeos a las ganadoras del Mundial por parte del presidente de la RFEF, Sr. Rubiales, de la que usted es vicepresidente, así como es también presidente del Comité Nacional del Fútbol Femenino de la propia RFEF, por lo tanto, el cargo ejecutivo más importante del fútbol femenino nacional.

Tras la notificación de la RFEF en la que anuncia que el viernes habrá una Junta extraordinaria en la que se van a tratar los hechos y en la que se dará cuenta de la apertura de diligencias en base al Código de Integridad que rige en la RFEF le insto, como presidente de mi Federación y siendo usted quien me representa, se postule abiertamente y de forma clara sobre cual va a ser su postura.

Como entrenador nacional, adscrito a la RFEF y como entrenador adscrito a la Federación Navarra de Fútbol, le exijo públicamente a que, de igual forma que se pronuncia en la web de la Federación Navarra en los éxitos y se ve recompensado por ello, lo haga en relación a todo lo acontecido con el Sr. Rubiales, lo que incluye el tocamiento de genitales, el beso no consentido a una jugadora de la selección, las burlas e insultos a personas que como yo mostramos nuestro profundo rechazo ante un hecho “cuasi delictivo” y ante las disculpas obligadas que una vez más denotaron la falta de moral y ética del Sr. Rubiales.

No necesito esperar al viernes para saber lo que piensa una Junta extraordinaria, lo sé sin duda alguna, lo que necesito y me urge saber es si quien me representa como máximo mandatario de mi Federación, está del lado de las personas con valores, ética y respeto hacia cualquier colectivo como lo son la mayoría de los afiliados a la Federación Navarra de Fútbol o por si el contrario, se posiciona a favor de encubrir las inmoralidades y vejaciones del Sr. Rubiales con el único objetivo de perpetuarse en un asiento que de ser así, lo único que significará es que usted es tan responsable como el Sr. Rubiales de los hechos ocurridos, por acción u omisión.

Basta ya de callar, basta del miedo a las represalias, esto es una VERGÜENZA y un bochorno para nuestro fútbol y para nuestro país como marca España ¿o cree usted que estos actos no van a tener consecuencias en la elección como sede conjunta con Portugal del Mundial de Fútbol? No le quepa ninguna duda de que la tendrá y tanto el Sr. Rubiales como todos aquellos que se sitúen a su lado serán responsables de lo que ocurra.

Hable ahora, sea valiente, piense en su familia, pregúnteles su opinión porque de no ser así, su silencio cómplice le perseguirá siempre donde quiera que vaya y le inhabilitará para ser punta de lanza o promotor, de cualquier acción en los que los valores, la moral y el respeto tengan algo que decir.

Un saludo.

El autor es entrenador nacional de fútbol.