Juan Antonio Pérez, (21/09/1952, Las Palmas de Gran Canaria) canario de nacimiento y tudelano de adopción, presenciará este miércoles el encuentro entre dos de sus exequipos: Tudelano y Las Palmas. El destino quiso que el que fuera portero de ambas entidades durante la década de los 70 esté presente en el Ciudad de Tudela en el encuentro correspondiente a la segunda ronda de la Copa del Rey.

Ha militado en Tudelano y Las Palmas, dos equipos que se miden en segunda ronda de Copa del Rey. Un partido especial para alguien que ha defendido la portería de los dos equipos

–La verdad que sí, porque me hizo ilusión por mi equipo, que es Las Palmas. Estuve cedido un año en el Tudelano muy a gusto y me quedé en Tudela. La gente me pregunta ‘¿con quién vas?’ y yo les digo que el equipo que más goles meta pasa de ronda. Pero bueno, también llevo dentro al Tudelano y no puedo dar un resultado porque equipos de mayor nivel han caído contra equipos de menor nivel que el Tudelano. Lo importante es que haya un buen ambiente, que sea un partido bonito y luego ya sabes, el resultado es el que manda. Son dos equipos que quiero, en los que he estado jugando y la verdad es que me ha hecho ilusión.

¿Siguió el sorteo?

–Fue una casualidad. Estaba en el Hotel Tres Reyes con Carnevali y el director deportivo, y comentamos que podía caer el Tudelano. Me dijeron que no era mala idea, porque luego Las Palmas juega en Vitoria. Ya me han dicho desde Las Palmas que fue casualidad. Siempre es agradable ver a tu equipo de nuevo.

Juan Antonio Pérez, arriba a la derecha, en un once de Las Palmas. Cedida

¿En qué ha cambiado el fútbol de su época al de ahora?

–La verdad es que ha cambiado en todo. La velocidad, la táctica… antiguamente era un fútbol más fuerte, más duro, duro en el sentido de más agresivo. Hoy en día los jugadores tienen otra preparación, tienen más partidos y el fútbol sigue siendo el fútbol. Las Palmas sigue jugando al fútbol como hace 40 o 50 años. Cambian los sistemas, pero el estilo de jugar de los equipos sigue siendo el mismo.

¿Lo nota en los porteros de ahora también?

–También. Antiguamente había porteros que jugaban con los pies. Yo no era portero, empecé jugando de delantero y defensa y jugaba bien con los pies. Ahora el portero es un defensa más y tener uno que tenga buen toque de balón es una garantía más.

¿Qué le llevó a venir a Tudela y al Tudelano?

–La opción era muy fácil porque el entrenador que tenía el Tudelano, Rosendo Hernández, era canario. Yo estaba en Las Palmas de tercer portero y en aquella época estaban Carnevali y Catalá, y Rosendo Hernández pidió en Las Palmas un portero. A mí me dijeron ‘vete, que te interesa jugar’ y me vino de maravilla porque me hice más portero. En aquella época había mucho más barro y agua que en los campos de ahora. Y la verdad es que me vino muy bien. Conocí luego a mi mujer y aquí estoy. Encantado de la vida.

Juan Antonio Pérez, arriba a la derecha, durante su etapa en el Tudelano. Cedida

¿Qué guarda de su corta etapa aquí? 

–Guardo muy buen recuerdo. La gente se portó muy bien conmigo y con mis compañeros. Estuvimos tres o cuatro canarios. Llegamos, teníamos un muy buen equipo, la gente estaba contenta con el equipo y con nosotros y luego tuve que irme a Las Palmas y me quedé en el primer equipo. Pero en Tudela la gente estaba muy contenta conmigo, y ahora también. Yo estoy encantado de estar en Tudela.

¿Sigue la actualidad de sus dos exequipos?

–La del Tudelano menos, pero la de Las Palmas siempre. En algún desplazamiento cercano suelo ir, sí.

¿Cómo ve la eliminatoria?

–Voy a disfrutar, viendo a los dos, porque voy a ver fútbol. Reconozco que Las Palmas es superior, pero luego el que mejor lo haga o más suerte tenga es quien se lleve el gato al agua. La clave depende de cómo salgan los equipos, porque normalmente en la Copa salen a jugar los que no tienen minutos y eso es un arma de doble filo. También depende del Tudelano, de la alegría y euforia que tenga, que eso te da un punto más.

¿Qué supone para el Tudelano disputar este partido?

–La ilusión que hemos tenido, y me pongo como ejemplo a mí, cuando estaba en el filial y te toca un equipo superior en una competición. Y te hace ilusión sobre todo que te toque un equipo de Primera División, y más si es un equipo como Las Palmas que está en racha y está haciendo un fútbol muy bonito. Es la ilusión de todo equipo inferior de poder superar a uno superior.