Quique Sánchez Flores es el nuevo entrenador del Sevilla, en sustitución del uruguayo Diego Alonso, destituido el pasado sábado tras perder 0-3 ante el Getafe, y ha firmado un contrato con el club hispalense por lo que resta de esta temporada y la próxima, hasta junio de 2025. Quique, de 58 años, dirigió ayer su primera sesión de entrenamiento en la Ciudad Deportiva sevillista, fue presentado en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán y hoy debutará con su nuevo equipo en el partido contra el Granada en el Nuevo Los Cármenes (21.30).

El Sevilla informó en un comunicado del acuerdo alcanzado con el entrenador madrileño para que se haga cargo del equipo, después de despedir el pasado sábado al uruguayo Diego Alonso tras no haber ganado en doce encuentros entre LaLiga (5 empatados y 3 perdidos) y la Liga de Campeones (4 derrotas).

Enrique Sánchez Flores (Madrid, 2 de febrero de 1965), hijo de jerezanos –el exfutbolista del Betis y del Real Madrid Isidro Sánchez y la artista Carmen Flores– y con raíces en una ciudad en la que vivió de niño y en sus primeros años de juventud, fue socio del Sevilla en esa época y en una entrevista en 2011, cuando figuró entre los candidatos para relevar en el banquillo sevillista a Gregorio Manzano, vaticinó que “el Sevilla es un club al que tarde o temprano” entrenaría.

Quique Sánchez ha entrenado a Getafe, Valencia y Benfica, con el que ganó su primer título –la Copa de la Liga en 2009–, Atlético de Madrid (conquistó en 2010 la primera edición de la Liga Europa y también la Supercopa de Europa); posteriormente, entrenó en los Emiratos Árabes Unidos al Al-Ahli, durante dos temporadas, y luego al Al-Ain, hasta que en la temporada 2014-15 volvió al Getafe antes de fichar por el Watford. De vuelta a España, estuvo en el Espanyol, marchó después al Shanghai Shenhua chino y Watford y Getafe han sido sus últimas experiencias. Efe