La UEFA utilizó el marco de la final de la Supercopa de Europa, celebrada este pasado miércoles en Udine, para lanzar un mensaje contra Israel, más claro con la presencia de niños refugiados palestinos en la entrega de medallas junto al presidente del ente que rige el fútbol continental, Aleksander Ceferin.

“Dejad de matar niños. Dejad de matar civiles”, fue la pancarta que lució la foto inicial sobre el césped delante de las alineaciones de PSG y Tottenham. El mensaje corrió como la pólvora por las redes sociales, aunque con cierta crítica a la ambigüedad de la cita, como posicionamiento contra Israel por su invasión sobre Gaza.

La UEFA había adelantado en un comunicado su intención de lanzar dicho llamamiento, con la presencia de niños procedentes de diferentes zonas de conflicto. “Dos niños refugiados palestinos participan en la ceremonia de entrega de medallas junto al presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, en la Supercopa de la UEFA 2025”, añadió, señalando a Israel.

La Fundación para la Infancia de la UEFA invitó a esos dos niños: Tala, “una niña palestina de 12 años con una salud delicada y Mohamed, un niño de 9 años que perdió a sus padres durante la guerra y resultó gravemente herido tras un ataque aéreo”.