La Mutilvera recibirá a un histórico en su campo. Los navarros jugarán contra el Zaragoza, que actualmente no pasa por su mejor momento en Segunda, donde va penúltimo con una victoria y tres empates en ocho partidos, con cuatro goles a favor y ocho en contra.
El proyecto zaragocista está dirigido por Gabi Fernández, quien renovó su contrato hasta 2026 después de tomar las riendas del primer equipo el curso anterior. La afición y la directiva confían en su conocimiento del club y en su carácter para dotar al Zaragoza de una identidad sólida y competitiva. Sin embargo, hasta la fecha, los resultados no han acompañado y el equipo aún no ha logrado consolidar un estilo. La presión aumenta partido a partido, y encuentros como el de la Mutilvera serán clave.
En el plano ofensivo, el Zaragoza ha reforzado su arsenal goleador con la llegada de jugadores experimentados. Entre ellos destaca Kenan Kodro, delantero que vuelve a la escena navarra tras un largo periplo por Europa. El ariete, que hizo historia en su etapa anterior en Osasuna logrando el ascenso a Primera División en 2016 con un gol decisivo ante el Girona, afronta ahora la última etapa de su carrera profesional. La vuelta de Kodro no solo supone un refuerzo de cara a la portería rival, sino también un aporte de experiencia y liderazgo dentro del vestuario. Su conocimiento de la categoría y su capacidad para generar peligro serán piezas clave para que el Zaragoza recupere la confianza y pueda sumar puntos de manera urgente.
Para la Mutilvera, recibir a un equipo de la talla del Zaragoza representa una oportunidad única de medirse a un histórico y, al mismo tiempo, poner a prueba su propia competitividad. El partido permitirá a los jugadores locales medir su nivel frente a un club con mayor trayectoria y presupuesto, además de ofrecer a los aficionados la emoción de un duelo con historia y protagonismo mediático. La expectación es máxima, y se espera un ambiente intenso en las gradas, con seguidores deseosos de ver cómo su equipo se enfrenta a un rival de nivel superior.