Las cremas y sopas frías de verano están muy bien, pero pocas cosas hay más reconfortantes que una sopa o un caldo caliente a la hora de cenar en invierno. Sencillas de preparar en su mayoría, con un buen caldo que se puede tener preparado y congelado, preparar los ingredientes básicos no quita tiempo. Después es solo dejar cocer todo junto.
Aquí ofrecemos cuatro recetas de toda la vida que harán disfrutar a todos.
Sopa de cebolla
Ingredientes
- 6 cebollas grandes
- 2 cucharadas de aceite de oliva extra
- 60 g de mantequilla
- Un diente de ajo
- 2 l de caldo
- 12 rebanadas de pan de barra
- 3 cucharadas de harina de trigo
- Una cucharadita de azúcar
- Sal y pimienta negra molida
- 100 g de queso rallado
Elaboración
Cortar en juliana fina las cebollas que se reservan en un bol. Calentar el aceite en una cazuela grande y se derrite la mantequilla para dar un poco de cuerpo. Incorporar las cebollas y el ajo muy picado. Salpimentar al gusto. A fuego medio-suave, remover la cebolla hasta que quede trasparente, evitando que coja color. Cocer durante unos 20 minutos con la cazuela tapada para que líquido que suelte la cebolla no se evapore y evite que coja color.
Pasado ese tiempo, espolvorear la harina en la cazuela y remover con cuidado para mezclarla bien para ayudar a que ligue y luego espese. En este punto y de manera opcional se le puede añadir un vasito de coñac que habrá que dejar que evapore el alcohol. Añadir el caldo que más guste y llevar a ebullición a fuego medio a ebullición y cocer otros 15-20 minutos a fuego suave.
Cortar el pan rebanadas finas y tostarlo un poco. Se pueden untar con un poco de ajo antes de colocarlas sobre la sopa ya servida en el plato o en el cuenco o de la fuente. Espolvorear el queso de forma abundante y gratinar a 220º en el horno precalentado durante 5 minutos. Servir bien caliente.
Sopa de ajo o sopa castellana
Ingredientes
- 10 dientes de ajo
- 1 huevo por persona
- 12 rebanadas de pan duro
- 150 g de jamón serrano
- 3 litros de caldo de carne o agua
- Sal y pimienta
- 2 cucharadas de pimentón dulce
- 50 ml de aceite de oliva virgen
Elaboración
Pelar y filetear los ajos para poner en una cazuela grande en la que se ha calentado el aceite, Saltear hasta que empiecen a coger color y añadir el jamón, también picado. Remover hasta que queden bien mezclados ajo y jamón. Añadir 6 de las rebanadas de pan y darles unas vueltas. Para añadir el pimentón, retirar la cazuela del fuego para evitar que se queme mientras da color y aroma.
Una vez bien rehogados los ingredientes, volver a poner la cazuela al fuego y echar el caldo o el agua. A fuego suave y evitando que el líquido hierva, dejar cocer durante 20 minutos antes de añadir el resto del pan que previamente se ha tostado. Dejar que flote hasta que se ablande.
A la hora de incorporar los huevos, se pueden separar las yemas de las claras. Poner estas últimas en la cazuela y dejar cuajar dos o tres minutos. Con la sopa muy caliente, poner cada yema en el plato y servir la sopa por encima. Con el calor dejara de estar cruda pero mezclará bien. Otra opción es poner los huevos enteros en la sopa y dejar que se vayan cuajando.
Sopa de pollo
Ingredientes
- Medio pollo
- 2 ramas de apio
- Un puerro
- 3 zanahorias
- 4 litros de agua
- 100 g. de fideos finos
- Sal
Elaboración
Quitar la piel y la grasa del pollo. También lavar y picar las verduras al tamaño que nos guste. En una cazuela grande se ponen el pollo, el apio, las zanahorias y el puerro. Salar abundantemente y cubrir con todo el agua. Se cuece a fuego medio durante unos 40-50 minutos con la tapa puesta. Pasado este tiempo se saca la verdura y el pollo y se reserva. Quedarán unos tres litros de caldo.
Se vuelve a poner la cazuela con el caldo al fuego y cuando empiece a hervir incorporar los fideos, cociéndolos el tiempo que indique el paquete. Mientras, se puede ir deshuesando el pollo y volver a picar las verduras si se quiere más pequeñas. Se pueden añadir después en el plato como complemento a los fideos.
Sopa de tomate
Ingredientes:
- 1 kg de tomates maduros
- 1 l de agua
- Una cebolla
- 2 dientes de ajo
- Un pimiento rojo mediano
- Una zanahoria
- Una cucharada de azúcar
- Una hoja de laurel, menta o perejil para decorar
- Sal, pimienta y aceite de oliva
- Pan (opcional)
Elaboración:
Pelar y picar menudo la cebolla, el pimiento rojo, los ajos y la zanahoria. En una olla, poner chorrito de aceite de oliva, y añadir la verdura para pocharla a fuego bajo. Salpimentar al gusto. A mitad de pochado, añadir el azúcar. Remover de vez en cuando para que no se peguen ni se queme.
Mientras se va pochando la verdura, a los tomates se le quitan los tallos y se les hace un corte en cruz. Se llena de agua una segunda olla, que hay que hacer hervir. Cuando llegue a ebullición , introducir los tomates para escaldarlos durante un minuto. Pasado este tiempo, sacar los tomates y dejar que se templen y quitarles la piel, que saldrá fácil, prácticamente sin esfuerzo.
Picar fino los tomates e incorporarlos a la olla cuando la verdura ya esté pochada. Darle vueltas durante un par de minutos y añadir el agua. Llevar a ebullición y dejar que se cueza durante 20 minutos a fuego medio sin dejar de hervir. Pasado este tiempo, la sopa habrá adquirido el tono rojizo característico. Apartarla del fuego para que se enfríe y batirla.
Para presentar en el plato se puede añadir tozos de pan frito, unas hojas de albahaca o de perejil. Un poco de queso rallado también es una buena idea.