Desde la Fundación Española de la Nutrición (FEN) se refieren al pepino como una hortaliza de bajo contenido calórico debido a su reducido contenido en hidratos de carbono, en comparación con otras hortalizas, y a su elevado contenido de agua.
Un antinflamatorio natural que previene la hipertensión y ayuda a perder peso
Un alimento que aporta pequeñas cantidades de folatos y en proporciones aún menores, tiamina y niacina. "El aporte vitamínico más elevado es el de vitamina C. El consumo de 125 g de pepino cubre el 16% de las ingestas recomendadas para la población de estudio", detallan los especialistas de la FEN.
"En su piel se encuentran pequeñas cantidades de b-caroteno, pero una vez que se pela el pepino, su contenido se reduce casi a cero. El pepino no se considera una hortaliza rica en minerales, si bien el más abundante es el potasio. En menor proporción se hallan el fósforo, magnesio y hierro. En la composición del pepino está presente una pequeña proporción de b-sitosterol: esterol que se encuentra de forma natural en el mundo vegetal donde cumple la función de mantener la estructura y el funcionamiento de las membranas celulares", detallan los especialistas.
Los expertos afirman que el pepino es bueno para el cerebro, es un antiinflamatorio natural, ayudar a combatir el estrés, mejora las digestiones, ayuda a perder peso, protege el corazón y previene la hipertensión, estimula el sistema inmunitario y tiene efector protectores frente a determinados tipos de cáncer.
El truco viral para que el pepino no repita ni amargue
Eso sí, hay algo de esta hortaliza que, en ocasiones, echa para atrás. Esa cuestión no es otro que el hecho de que pueda estar amargo y de que su sabor repita durante horas tras su ingesta. Hay quien haciendo pruebas ha dado con la clave para que el pepino ni repita ni amargue. El nombre de la persona que ha dado a conocer el truco definitivo es Patricia y su nombre de usuario tanto en Instagram como en TikTok es @whatthepato.
Tal y como se puede ver en la publicación de la creadora de contenido, que cuenta con más de 95.000 me gustas, la clave está en un método de lo más sencillo. El proceso consiste en lo siguiente: lavar el pepino, cortar por uno de los extremos y frotar contra el otro extremo mediante movimientos circulares. Aunque al principio no ocurre nada visible, si se insiste durante unos segundos, comienza a aparecer una espuma blanca en la superficie. Esta sustancia es la cucurbitacina, que contiene compuestos responsables del sabor desagradable que a veces acompaña a este alimento, y que parece extraerse al frotar el extremo del vegetal.
Una espuma que, por supuesto, no debe ingerirse. Una vez el peino deje de expulsar esa espuma, es importante enjuagarlo bien. Para asegurarse es importante repetir el mismo proceso en ambos extremos del pepino.