El truco de Joseba Arguiñano para no llorar al cortar cebolla

Apenas faltan unas horas para la cena de Nochebuena, y se espera que durante el día de hoy miles de personas pasen la tarde en su casa cocinando aquellos platos con los que esperan deleitar a sus familiares.

Bacalao, sopa de pescado, cordero, chipirones en su tinta... son muchos los platos típicos de Nochebuena, aunque la mayoría de ellos tienen ingredientes comunes, y uno de ellos es la cebolla.

La cebolla es una verdura versátil que se añade a prácticamente cualquier plato salado, y aunque es fácil de preparar, provoca un problema común en casi todos: mientras la cortamos se nos pueden caer varias lágrimas.

"Cortar cebolla sin llorar es posible, y yo te voy a enseñar cómo hacerlo fácilmente", escribió en un post reciente el chefJoseba Arguiñano.

El reconocido chef señaló que es importante tener el cuchillo bien afilado, ya que al cortar suelen saltar unas "chispas" que provocan las lágrimas: "Cuanto más afilado esté el cuchillo, menos va a saltar".

También explicó que no debemos acercar nuestra cabeza a la cebolla: "Una vez la pelemos, es importante no estar con la vista ahí metida".

Más allá de dichos consejos, subrayó que el truco infalible es protegerse los ojos con unas gafas.

A modo de consejo, agregó que "un buen corte no solo evita lágrimas, también es más seguro y preciso".

Platos para comer en familia

Joseba Arguiñano no deja de sorprender a su audiencia con unos espectaculares platos sencillos e ideales para comer en familia.

En uno de sus últimos programas quiso preparar una de las recetas más característicos de la gastronomía guipuzcoana: alubias de Tolosa con sus sacramentos.

Según explicó, para preparar unas buenas alubias de Tolosa, lo único que hace falta es disponer de tiempo y de fuego lento.

La dificultad de preparación es muy baja, y los ingredientes necesarios son alubias de Tolosa, berza, morcilla fresca, chorizo, tocino, aceite de oliva virgen extra, sal y piparras, aunque el chef explicó que hacen falta unas tres horas para cocinar el plato.

El guipuzcoano puso en valor este plato tan tradicional , y lo quiso calificar como "el plato de cuchara más tradicional del País Vasco".

"¡Ay ama! ¡Cómo huele esto y vaya 'pintaca' tiene! Un guiso que sabe a domingo, fuego lento y buena compañía", sentenció.

Estilo fresco y creativo

Joseba Arguiñano es una de los rostros más populares de la televisión vasca.

El hijo de Karlos Arguiñano ha conseguido abrirse hueco en el mundo de la gastronomía, y cada día una audiencia fiel le acompaña en su programa de ETB1 'Joseba Arguiñano Sukalerrian'.

Nacido en Zarautz en 1985, es un destacado chef y repostero que ha sabido forjar su propio nombre dentro del mundo culinario. Joseba ha heredado la pasión de su aita por la cocina, pero ha logrado destacar gracias a su estilo fresco, creativo y su enfoque innovador.

Su formación comenzó en la prestigiosa Escuela de Hostelería Aiala de Zarautz, dirigida por su padre, donde adquirió una sólida base técnica en cocina y repostería.

Posteriormente, amplió su experiencia trabajando en reconocidos restaurantes y obradores, lo que le permitió perfeccionar sus habilidades y desarrollar su particular visión de la gastronomía.

Especializado en repostería, Joseba ha conseguido combinar el respeto por las técnicas tradicionales con toques modernos y creativos. Su cocina destaca por el uso de productos locales, de temporada y por una cuidada estética, donde los postres se convierten en pequeñas obras de arte.

Gran popularidad

Además de su trabajo en los fogones, Joseba Arguiñano ha ganado popularidad gracias a su participación en programas de televisión y colaboraciones en medios, donde demuestra su carácter cercano, espontáneo y su amor por la gastronomía. 

Su carisma y estilo natural lo han convertido en un referente para las nuevas generaciones de cocineros y aficionados a la cocina.

Actualmente, además de ser una figura mediática, lidera proyectos gastronómicos propios, consolidándose como uno de los chefs más prometedores del panorama culinario vasco. 

Con su dedicación, creatividad y compromiso con los ingredientes de calidad, Joseba Arguiñano continúa el legado familiar, aportando su sello personal y manteniendo viva la esencia de la cocina vasca.