Ni un euro, ni un dólar, ni una libra, ni nada. Alain Delon ha decidido dejar sin herencia a sus hijos para evitar cualquier tipo de pelea cuando muera. Esta decisión 'post mortem' ha llevado al francés a vender todo su patrimonio, valorado en 275 millones de dólares, según le atribuyen algunos medios.

Su plan es subastar todo su patrimonio, "guste o no", y evitar cualquier tipo de conflicto, batalla o pelea entre sus hijos. El actor ha llegado a este punto drástico porque se juró a sí mismo que no iba a repetir lo mismo que le ocurrió a Johnny Hallyday, cantante de rock e íntimo amigo de Delon.

La familia del cantante llegó a citarse en los tribunales por el reparto de la herencia, algo que a Alain Delon le destrozó. "Lo estoy preparando y quedará resuelto antes de mi muerte, guste o no. Si no lo hiciera, sería terrible, estallaría una guerra entre hermanos y es algo muy triste que jamás quiero que ocurra", aseguraba en 2018 a 'Paris Match'.

El eterno galán francés ha subastado ya varias obras de arte en París, entre las que se encuentran joyas de Matisse, Degas, Delacroix, Millet y Raoul Dufy.