La relación sentimental de Sandra Bullock (59 años) con su novio, el modelo y fotógrafo Bryan Randall (57 años), ha terminado de forma inesperada. Y lo ha hecho de la forma más trágica posible. Por desgracia, ha fallecido a causa de una grave enfermedad. Era la propia familia la que hacía público su fallecimiento a través de un comunicado en el que decía: "Con gran tristeza compartimos que el 5 de agosto, Bryan Randall falleció en paz después de una batalla de tres años contra la ELA ”.

La Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) ha sido la causa de su fallecimiento. Sin embargo, Bryan Randall no quiso compartir que padecía esta enfermedad degenerativa. "Bryan prefirió mantener su camino con ELA en privado y los que lo cuidamos hicimos todo lo posible para honrar su petición", ha explicado la familia del novio de Sandra Bullock.

“Pedimos privacidad para llorar y asumir la imposibilidad de despedirnos” y "estamos inmensamente agradecidos a los incansables médicos que navegaron por el paisaje de esta enfermedad con nosotros y a las asombrosas enfermeras que se convirtieron en nuestras compañeras de habitación, a menudo sacrificando a sus propias familias para estar con la nuestra”, han agradecido.

Sandra Bullock, por su parte, no se ha pronunciado ni ha realizado ningún gesto público sobre la muerte de su novio. Sin embargo, ha estado a su lado de forma incondicional hasta el final. Hace ya un año que la famosa actriz anunció su retirada durante un tiempo del mundo del cine, sin más explicaciones. Ahora, al conocerse que su novio estaba gravemente enfermo, parece cobrar sentido esta decisión y todo apunta a que priorizó acompañar a Bryan Randall de forma inseparable en los duros momentos que atravesaba.

Sandra bullock junto a su pareja, Bryan Randall. Agencias

Cómo se conocieron

La relación de Sandra Bullock y Bryan Randall comenzó en 2015. Se conocieron durante una fiesta de cumpleaños de uno de los hijos de la actriz y a partir de entonces mantuvieron una relación muy discreta y nunca posaron juntos. El modelo, reconvertido a fotógrafo, siempre cedió a su chica todo el protagonismo en todos los eventos a los que acudían. 

Aunque nunca quisieron mostrar su relación ante las cámaras, en la vida diaria formaban una pareja muy cómplice, tal y como asegura su círculo de amigos. De hecho, en más de una entrevista, a Sandra Bullock se le escapaban algunos elogios a su novio: “Es súper amable. Para los niños él es el número uno y yo la número dos, y lo entiendo, porque es más divertido que yo y les da siempre mejores premios”, contaba en una entrevista concedida a la revista InStyle. De lo que nunca habló fue de su enfermedad. Cumpliendo con el deseo de Bryan Randall, fue un secreto que guardaron ambos y que no hemos descubierto hasta ahora.