A medida que pasa el tiempo, la atención mediática del caso de Daniel Sancho ha ido decreciendo. El cocinero español sigue en Tailandia desde verano, cuando fue detenido acusado de asesinar y descuartizar al cirujano Edwin Arrieta. Desde entonces, el hijo de Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo continúa en prisión preventiva en la cárcel de Koh Samui. Mientras tanto, su defensa, encabezada por el abogado Marcos García Montes, ha trabajado en una estrategia que pueda salvarle de la pena de muerte en el futuro juicio.

En estos momentos, la siguiente fecha del proceso judicial tendrá lugar el 12 de diciembre ante el juez. Esta será, posiblemente, la última antes de que se conozca la fecha del juicio. Después de pasar meses sin asistencia legal en Tailandia, parece ser que Daniel Sancho ya cuenta al fin con un letrado tailandés, requisito imprescindible para hacer frente al juicio. Además, contarían con un plan trazado para que su defensa sea lo más exitosa posible.

El objetivo del equipo legal del joven y su familia es desvirtuar la acusación del asesinato. Según la defensa, la muerte de Edwin Arrieta fue accidental y, por lo tanto, Daniel no podría ser condenado. Los abogados pretenden demostrar que se produjo una pelea que terminó con la vida del colombiano y que no existiría premeditación por parte del cocinero. Al mismo tiempo, argumentarían que los utensilios adquiridos en los días anteriores sirvieron únicamente para su trabajo.

Los próximos movimientos

La imposibilidad de determinar la causa exacta de la muerte de Edwin Arrieta es un factor que juega a favor de Daniel Sancho. Sin embargo, la policía tailandesa no pudo hacerse con los restos mortales del colombiano, por lo que no se ha podido demostrar si la muerte fue consecuencia de una agresión física o una puñalada. Estos datos podrían ayudar a lograr desvirtuar la acusación, pero no será sencillo, puesto que las autoridades del país asiático consideran que hay pruebas más que suficientes para acreditar que la muerte del cirujano fue un asesinato premeditado.

Lo que sí ha llegado a reconocer Daniel Sancho es el descuartizamiento del cuerpo. Este delito conllevaría una pena muy baja en el país asiático, por lo que no tendría que volver a entrar en prisión. De momento, habrá que esperar a la fecha del juicio, que tendrá lugar en los meses de febrero y abril.