¿Se puede devolver un colchón después de probarlo? La OCU tiene la respuesta

Una persona en edad adulta debe descansar al menos 6 horas al día. Así lo afirman los profesionales de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

La importancia de analizar la firmeza adecuada y el mejor material del colchón

Una serie de horas en las que el cuerpo repara tejidos, fortalece el sistema inmunológico, mejora la memoria, el aprendizaje, la resolución de problemas y la concentración, regula las emociones, reduce el estrés y reduce el riego de desarrollar problemas de salud mental como la depresión y la ansiedad, entre otras.

Tal es su importancia, que es fundamental contar con el colchón y la almohada que mejor se ajuste a las necesidades del cuerpo. Por ello, antes de comprar un colchón, es esencial evaluar el tipo de colchón, es decir, ver si es un colchón de muelles, de espuma de poliuretano, con capa de espuma viscoelástica o de látex. Después, y tal y como así lo indican los profesionales de la OCU, hay que analizar la firmeza adecuada y el mejor material del colchón.

Es posible que, incluso analizando todos estos factores, el consumidor no esté convencido con su compra y quiera devolverlo. Pero, ¿puede hacerlo?

¿Se puede devolver un colchón después de probarlo? Esto es lo que dice la ley

Una cuestión a la que le han dado respuesta los expertos de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). En la línea con lo que se comenta desde esta entidad, desde 2019, la normativa es clara, y las empresas más serias del sector la cumplen. De ahí la importancia de adquirirlo en un comercio, ya sea físico o digital, que ofrezca confianza y respaldo legal. En esa misma línea, los especialistas detallan la Directiva 2011/83/UE del Parlamento Europeo ya regula los derechos de los consumidores en compras presenciales y online, asegurando también los colchones.

Cada vez son más los comercios que ofrecen 'prueba de sueño', que pueden durar entre 30 y 100 noches

Otro factor son las famosas 'pruebas de sueño' que, aunque lo están incluidas a nivel legal, muchas empresas ofrecen una horquilla entre las 30 y las 100 noches, con algunas condiciones: desde el uso de funda protectora a mantener un buen estado del producto y la posibilidad de incluir un recargo de gastos de envío. Según explican, la normativa reconoce el derecho de desistimiento en compras por internet, pero excluye ciertos artículos por higiene, en el caso de que hayan sido abiertos. Una excepción que durante años muchas empresas la aplicaron a colchones, aceptando devoluciones solo si permanecían sellados en el plazo de 14 días.

En la línea con lo que comentan, un colchón desprecintado sí puede devolverse. Es sí, es fundamental verificar las políticas de cada vendedor para evitar sorpresas. Sobre devolver un colchón que se encuentre en mal estado, la OCU recuerda que la Ley General para la Defensa de los Consumidores (Real Decreto Legislativo 1/2007) establece que, si el colchón presenta fallos de fabricación o desperfectos no causados por el cliente, se considera un producto no conforme. En estos casos, el comprador puede exigir la reparación o reemplazo del colchón sin coste y la aplicación de la garantía legal de 3 años (para compras realizadas desde el 1 de enero de 2022).

Por lo tanto, si el producto se ha estropeado después de usarlo y es un defecto de fábrica, la garantía cubre la reparación o sustitución. Tras los primeros 6 meses, el vendedor puede exigir pruebas de que el daño no fue provocado por el usuario. Eso sí, si el problema surge por mal uso, el comprador pierde el derecho a reclamación, tal y como así lo afirman desde la OCU.