¿Tocar el bolsillo de eléctricas para abaratar el recibo de la luz de la plebe? ¡Hasta ahí podíamos llegar! "Las eléctricas como falsos culpables", sale el editorialista de La Razón en defensa de las pobrecitas compañías. He aquí la miga de su argumento: "En La Moncloa se ha optado por el rancio populismo de la izquierda, que convierte a los empresarios en enemigos del pueblo, en lugar de actuar sobre una reforma general de un mercado como el eléctrico al que no le queda sitio para más parches ni es capaz de soportar más errores de generación política". La pieza presuntamente informativa al respecto lleva este encabezado: "Rejonazo de 2.600 millones a las eléctricas para bajar la luz".

Y por si no quedaba claro con quién está el periódico del imperio Atresmedia, el director, Francisco Marhuenda, ata la burra dialéctica al mismo poste: "Sánchez ha irrumpido en nuestras vidas, empujado por Podemos y la presión de una indignada ciudadanía, convertido en un moderno «Robin Hood» dispuesto a robar a los ricos para dárselo a los pobres. El problema es que no hay un rico concreto. Son unas empresas fundamentales para la economía española que dan trabajo a centenares de miles de personas y empresas. No son propiedad de unos oligarcas, sino de un número incontable de inversores grandes, pequeños y medianos que les confían sus ahorros".

En el editorial de ABC, una nueva dosis de idéntico jarabe. Abran la boca: "Si la única solución que propone el Gobierno es imponer medidas confiscatorias, la estigmatización de las eléctricas, y fórmulas improvisadas para «detraer» unos 2.400 millones de sus beneficios, el resultado es otro parche y no una solución definitiva. De nuevo, Moncloa recurre a medidas provisionales, biensonantes y muy proclives a una suerte de populismo energético".

Ya ven, populismo, populismo y populismo. El Mundo ve la apuesta y la sube a bolivarismo: "La decisión de «detraer beneficios» a las compañías eléctricas, más propia de regímenes bolivarianos, es una irresponsabilidad que generará incertidumbre jurídica y económica -ayer mismo cayó la cotización de las eléctricas- y que señala a un culpable externo para desviar la atención de la propia insolvencia".

Todos somos fans de Ayuso, pero lo disimulamos

En este punto, les muevo el foco a otra pista. Quizá esperaban algo sobre la mesa de diálogo catalana, pero la pobreza de lo cosechado me inclina a esperar a mañana. Les prometo que está mucho más entretenida la guerra de barro en el PP, con la irrupción de ayusistas recalcitrantes como la opinadora de El Mundo Emilia Landaluce: "El PP estaba muerto tras el sorpasso de Vox en las catalanas pero la incontestable victoria de Ayuso le ha colocado en cabeza de todas las encuestas. Sobre todo porque Sánchez quedó noqueado y cada golpe a la presidenta de Madrid se le vuelve en contra. Basta con comprobar lo que pasó con las mentiras del pobrecito ponecuernos sadomaso de Malasaña". Ahí tienen: el bulo fue un milagro obrado por Santa Isabel de Chamberí.

Lo que no sabían es que ustedes y yo también bebemos los vientos por ella, lo que pasa es que no nos atrevemos a confesarlo. Palabrita de Salvador Sostres en ABC: "Es cierto que es muy madrileña, y que España y Madrid son dos cosas distintas, pero no hay ningún español que, en la intimidad y puesto ante su contabilidad diaria, no prefiriera a Ayuso que a cualquier otro político, incluso a los que él mismo haya podido votar. No existe ni un sólo independentista con dos dedos de frente que no reconozca en privado que nos iría mucho mejor con ella" ¡España entera se siente ayusera!

El último arrebato de pasión por la heroína de la Puerta del Sol lo firma Emilio Campmany en Libertad Digital. Es inevitable que en el mismo viaje le caiga un pescozón al antagonista: "¿Por qué se niega Casado? Para evitar que un triunfo abrumador de Ayuso en mayo de 2023, seguido de una derrota del PP en las generales del otoño de ese mismo año, obligue a ceder su liderazgo a la brava presidenta madrileña, que ha demostrado tener mucho más tirón electoral que él, gris presidente nacional del partido". Continuará.