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A Arcarons le roban el Dakar

Las trampas habituales de la organización del Dakar para favorecer a los pilotos franceses fueron escandalosas en la edición de 1995.

A Arcarons le roban el DakarARCHIVO

Se dispute en África o en Suramérica, el Rally Dakar es un producto francés, un negocio francés y, a veces, un juguete francés. Unas pocas cifras: en 31 ediciones disputadas, ha habido 12 dobletes franceses en coches y motos, y sólo cinco veces no ha habido un ganador galo ni en una ni en otra modalidad.

Al margen de pericia en la conducción, de buenos vehículos y de neumáticos adecuados, una de las principales claves en el Dakar es la orientación, y ahí es donde la organización arrima el ascua a su sardina, porque nada es más útil para un piloto que un chivatazo a tiempo del obstáculo que se va a encontrar en alguna etapa.

En el Dakar"95 las trampas fueron absolutamente descaradas para que el francés Peterhansel ganara en motos por delante de Jordi Arcarons.

El piloto de Vic tenía ya 32 años y una dilatada experiencia en el Dakar -en el que debutó en 1988, con un excelente triunfo en la categoría de 500 cc- para darse cuenta de cómo le arrebataron el triunfo. Y a su regreso de África estalló ante los medios: "Peterhansel ha tenido información privilegiada en todo momento. En Mauritania se mostró muy conservador, a pesar de ir detrás en la general, porque sabía que en Guinea, mientras el resto desconocíamos lo que nos íbamos a encontrar, él podría atacar. De todas formas, esto no es algo nuevo, porque es una carrera francesa y ellos siempre se ayudan".

Pero no sólo hubo información privilegiada. "Peterhansel estuvo reparando en lugares donde está prohibido, repostó aceite cuando no se podía, salió del campamento para ir a soldar y recibió ayudas de gente vinculada a la organización".

Por una sola de estas infracciones -cambiar un neumático-, a Marc Coma le han sancionado este año con seis horas, para apartarlo de la lucha por la general. A Peterhansel, en 1995, sólo le sancionaron con 10 minutos, y ganó por 23:16.

Tanta trampa y tanta falsedad no lograron acabar con la pasión de Jordi Arcarons por el Dakar. Compitió 16 veces como piloto (con cuatro segundos y dos terceros puestos) y lleva ya siete años consecutivos acudiendo como mánager -este año del AMV, equipo de Marc Coma y Jordi Viladoms-. Y sigue siendo consciente de que el Dakar no tendrá credibilidad hasta que la organización francesa quede totalmente al margen de la información privilegiada y no sea la encargada de juzgar las infracciones que se produzcan.