lo que han hecho estos chavales es la confirmación de que en deporte uno más uno no es igual a dos. Es la demostración de que desde el compromiso y la humildad se pueden recoger los frutos.

Ahora ya sólo les puedo decir que lo disfruten, porque lo demás ya sé que lo van a hacer. Cuando unos jugadores y un cuerpo técnico dan de sí todo lo que pueden y todo lo que tienen, más no se les puede pedir.

En un año deportiva y económicamente complicado para nosotros, llegar a estas semifinales tiene mucho mérito. Con 60 kilos menos en el presupuesto, pero con un valor humano que vale mucho más que eso, nos están haciendo vivir una serie de sensaciones indescriptibles tanto a los nueve miembros de la junta como a los aficionados.

El sábado no pude acompañarles en Madrid, pero seguro que desde allí escucharon los cánticos de mi familia celebrando el pase de eliminatoria. La pena es que no hemos tenido una semana para disfrutar de ese hito, sino que a los tres días nos espera otro partido tan importante como el anterior. Nuestra ilusión es que esto no acabe todavía. Queremos seguir sufriendo y disfrutando.