San Sebastián. Unos 9.000 espectadores asistieron ayer por la tarde en Anoeta de la primera edición de la Copa de Euskal Herria, un encuentro entre el Biarritz Olympique y el Aviron Bayonnais que acabó 10-0. El partido no tuvo un gran nivel, por los numerosos cambios que hicieron ambos equipos -la Liga Francesa arranca dentro de dos semanas-, pero fue una fiesta del rugby por el buen ambiente previo, con presencia de hinchas de toda Euskal Herria. Foto: Ruben Plaza
