Campeonato de Euskal Herria de Aizkora | Iker Vicente sigue sin encontrar rival

Iker Vicente sigue sin tener rival sobre la madera. Ni siquiera el retorno a una final de aizkolaris como Mikel Larrañaga o Julen Alberdi pudo poner en aprietos al de Otsagabia. Vicente logró en Azkoitia su cuarta txapela en el Campeonato de Euskal Herria con más de cuatro minutos de ventaja sobre el segundo clasificado, que no fue ni el azpeitiarra ni el azkoitiarra, sino Hodei Ezpeleta. El eibartarra revalidó su subcampeonato de 2023 y 2024 en un desenlace espectacular. Y es que la exhibición de Vicente dejó claro desde muy pronto quién iba a ser el campeón, y fue la lucha por la segunda plaza lo que despertó más emoción en esta final. Larrañaga completó el podio, y Alberdi tuvo que conformarse con la cuarta plaza tras haber sido segundo durante gran parte de la prueba. Julen Gabirondo y Xabier Zaldua cerraron la clasificación.

Desde el tercer tronco 

Alberdi y Zaldua arrancaron la final con un ritmo frenético y consiguieron ponerse en cabeza en los primeros compases de la prueba. 

Los aizkolaris tuvieron que partir, por este orden, dos kanaerdikos, dos troncos de 60 pulgadas, cuatro oinbikos, otros dos troncos de 60 y dos últimos kanaerdikos. 

Vicente se puso por delante en el primer tronco de 60 pulgadas y no volvió a abandonar la primera posición. Alberdi, Larrañaga y Zaldua siguieron al navarro, con Gabirondo y Ezpeleta más rezagados. 

Antes de comenzar el maratón de los oinbikos, Vicente aventajaba en 59 segundos a Alberdi, que se destaca ya como el principal perseguidor del campeón. 

Completada la primera mitad del trabajo, el navarro mejoraba en un minuto y 24 segundos el tiempo del azkoitiarra y en más de dos minutos el de Larrañaga. 

Alberdi, desfondado 

Los dos siguientes oinbikos fueron un infierno para Alberdi. Las maderas presentaron unos nudos que consumieron toda su energía y el azkoitiarra, atascado, se vio superado por Larrañaga y Ezpeleta. Por momentos, pareció incluso ocupar la penúltima posición.

Por delante, Vicente prosiguió sin perseguidores cercanos su sprint en solitario hacia su cuarta txapela. El navarro completó el trabajo en 39 minutos y 46 centésimas, cuando Larrañaga, entonces segundo, aún estaba en el penúltimo tronco. 

El azpeitiarra cortó el tercer kanaerdiko con tan solo catorce segundos de ventaja sobre Ezpeleta. Ambos agotaron sus fuerzas sobre el último tronco para hacerse con la segunda posición, y fue el eibartarra quien consiguió su objetivo. Ezpeleta conquistó la segunda posición por tercer año consecutivo con un tiempo de 43:47, y terminó superando en 51 segundos a Larrañaga, que no pudo recuperar el segundo puesto de 2019.

El eibartarra había llegado a ser el quinto clasificado, pero confió en su ritmo para ir remontando posiciones en la segunda mitad de la prueba.

Alberdi finalmente pudo mantener la cuarta plaza por delante de Julen Gabirondo y Xabier Zaldua, que hizo un excelente trabajo en la primera mitad de la prueba para acabar sufriendo después y terminar cerrando la clasificación.

Cuarta txapela 

Con esta victoria, Vicente cuenta ya con cuatro títulos en el Campeonato de Euskal Herria (2019, 2023, 2024 y 2025), a los que hay que añadir también dos victorias en el Aizkolari Txapelketa Nagusia (2020 y 2021).

“Este campeonato era mi principal objetivo”

Iker Vicente se mostró “muy contento” por su cuarta victoria en el Campeonato de Euskal Herria. “Este es el principal objetivo del año. Yo por lo menos pienso en esta txapela todo el año, y una vez cumplido este objetivo, estoy más tranquilo y muy contento”. 

El navarro no se alteró cuando se vio por detrás durante los compases iniciales de la final: “He empezado a mi ritmo. He visto que había otros por delante, pero me he centrado en mi trabajo. El sexto tronco era muy duro. He sacado bastante ventaja y a partir de ahí he intentado mantenerla”. 

El campeón reconoció en declaraciones a ETB que se quitaba un peso de encima con esta victoria: “Me presiono a mí mismo. Soy muy perfeccionista conmigo mismo y me exijo mucho. Esa presión también me hace mejorar”. 

Vicente está haciendo historia en el deporte de la aizkora: “Una txapela más supone estar un escalón por encima en los libros. El sueño de mi vida era ganarla una vez”.

Hodei Ezpeleta, por su parte, reconoció que no se esperaba el segundo puesto: “No sé si ha sido casualidad o no. Venía bastante nervioso. He empezado peor de lo que esperaba y me ha costado disfrutar. Todavía veo a Larrañaga y a Txikia mejor que yo”.

Mikel Larrañaga, el tercer clasificado, lamentó haber perdido la segunda posición: “Ha sido una pena. Iba segundo, y me he dado una paliza en un oinbiko, he salido cansado, he visto que Ezpeleta se me venía encima y ya no podía más, y me ha pasado en el último momento. Nunca he conseguido el primer puesto, pero a ver si algún año llega”.

Julen Alberdi fue segundo durante gran parte de la prueba, pero se descolgó en los oinbikos: “Creo que he empezado bastante bien, y tenía buenas sensaciones. En el tercer y en el cuarto oinbiko me he atascado y a partir de ahí he ido más justo. He empezado fuerte, pero me ha faltado frescura en el golpe al final. He gastado todas las fuerzas en los oinbikos, y no podía hacer milagros”.