Según la Dirección General de Tráfico (DGT), la lluvia es, con un 81%, el fenómeno que más aparece en los accidentes que se producen en épocas de mal tiempo, seguido de la niebla, con un 6%, el viento, con el 4%, y el restante 9% aglomera a la nieve, el hielo, etc.
El 17% de los accidentes de tráfico pueden deberse a las excesivas temperaturas
Pero no solo influye la climatología, también la temperatura del interior del vehículo. Tal y como señalan desde la Fundación Club Europeo de Automovilistas, el 17% de los accidentes de tráfico pueden deberse a las excesivas temperaturas. Para evitarlo, el conductor debe adoptar precauciones complementarias al volante, como mantener la temperatura adecuada dentro del vehículo y mantenerse hidratado, ya que el calor afecta directamente al conductor provocándole molestias y disminuyendo sus capacidades y reacciones. Pero, ¿qué temperatura recomendada en el interior de tu coche?
¿Qué temperatura se debe llevar dentro del coche?
Desde Real Automóvil Club de España (RACE) explican que "cuando conducimos, es aconsejable hacerlo con pocas prendas de abrigo para disponer de la libertad de movimientos necesaria para mover el volante, manejar la palanca de cambios y llegar con holgura a todos los mandos. Para ello es necesario disponer de una temperatura adecuada en el interior, donde no haga frío". Pero, ¿de qué temperatura se estaría hablando?
"La temperatura recomendada está entre los 21 y los 23 grados. Circulando a esta temperatura encontraremos mayor confort y, en un viaje largo, nos cansaremos menos y conduciremos más seguros. Una temperatura excesiva reduce la capacidad de reacción, disminuyendo los reflejos", argumentan los especialistas.
Tal y como apuntan desde la Dirección General de Tráfico (DGT), "el riesgo de sufrir un accidente se incrementa hasta el 20% si conducimos con una temperatura elevada. Por ejemplo, conducir con 35 grados provoca que el conductor deje de percibir el 20% de las señales de tráfico. También hace aumentar sus errores alrededor del 30%. Con el calor, la visión empeora, por lo que podemos sufrir un deslumbramiento: alrededor de 3.500 accidentes en España están relacionados con esos momentos en los que dejamos de ver la carretera".