de la mata al puchero y de la ubre al cazuelo. El ganadero cascantino Andrés Planillo Torres, de 32 años, ha puesto en marcha la primera máquina expendedora de leche fresca de la Ribera de Navarra y lo ha hecho en su localidad, donde es conocido desde siempre y donde se ha convertido en un referente del sector, entre otras cosas, por ser el propietario de Sara, la vaca que ha ganado en varias ocasiones certámenes de belleza europeos. La instalación, que ha supuesto una inversión cercana a los 110.000 euros, está en funcionamiento desde ayer y permanecerá en servicio durante todo el día, en la avenida de Madrid del municipio desde donde se suministra leche ordeñada ese mismo día en la granja que la familia Planillo tiene cerca del núcleo urbano de Cascante.

El litro de leche fresca, procedente de 60 de las 130 vacas con que cuenta Planillo, se vende a un euro, y se recepciona en una botella que puede ser llevada por el propio comprador o bien, ser adquirida en una expendedora anexa al precio de 0,30 euros.

garantía de calidad

Proceso de pasteurización

La expendedora, fabricada en Italia y suministrada desde Cataluña, cuenta con dos depósitos de 230 litros de capacidad y, en una pantalla electrónica, informa de manera continuada de la fecha de ordeño de cada tanque de leche, así como de la caducidad y de la temperatura de la misma. Además, después de cada servicio, la máquina realiza una autoesterilización de la cabina de carga de la leche y expende un ticket con todos los datos de la leche suministrada, que está ya pasteurizada y lista para beber sin necesidad de ser hervida. En caso de que el suministro de uno de los depósitos comience a reducirse, la máquina envía un mensaje al teléfono móvil de Andrés y le comunica la cantidad de litros que faltan y que es necesaria una reposición.

Planillo, que también suministra leche al grupo Pascual -cerca de 1.400 litros al día-, ha tenido que realizar una sala de pasteurización en la propia granja, así como pasar numerosos controles sanitarios antes de la instalación de la máquina que "ha despertado una gran expectación en Cascante porque ahora mi padre ya no salía a repartir por las calles y había mucha gente que todavía le pedía leche", explicó Planillo.

De hecho, Andrés constituye la tercera generación dentro del mundo de las vacas de la familia Planillo, "tras mi abuelo Santiago, quien comenzó con la cooperativa San Antón, y mi padre, Julián", recuerda el ganadero.

La idea de la instalación de la máquina apareció en uno de los viajes de Andrés a Italia con Sara, su vaca campeona de Europa, "un país en el que ya habrá más de 1.000 máquinas, un número muy superior a la docena que habrá en España, de las cuales tres están en Navarra y otra más que queremos montar en el futuro en Tarazona".

inauguración

Estrellas de la ganadería

Durante el acto de inauguración de esta instalación, que ha contado con la bendición del párroco de la localidad, Javier Ignacio Villaba, los usuarios han podido contemplar a tres de las vacas con que cuenta el ganadero cascantino (Sara, Sarica y Sari), así como los trofeos que les han hecho acreedoras del título de campeonas en sus respectivas categorías y que han servido de eslogan para este nuevo negocio: Leche de campeonas.