Atasco en Burlada por el corte de una rotonda

burlada. Las obras de asfaltado de la rotonda del Camino del Cementerio de Burlada causaron ayer al mediodía varios atascos en las vías conectadas a esta glorieta, como la calle San Francisco, calle Elizgibela, calle de la Ermita y la avenida María Azcarate.

A pesar de que las labores de asfaltado, con el consecuente cierre de la rotonda, comenzaron a las 9.15 horas, para evitar la congestión de la ida al trabajo y "la entrada de escolares", no se pudo evitar que, desde el mediodía y hasta la tarde, se produjesen atascos en las calles colindantes. En previsión de esta situación, a las 12.50 horas se abrieron al tráfico la mitad de los accesos de la glorieta (desde Villava y desde Areta) para "desahogar un poco" la circulación. La rotonda "es un atajo que viene muy bien y en las horas punta siempre hay retenciones, por eso preveíamos que iba a ser un día problemático", indicaron fuentes de la Policía Municipal de Burlada.

Hacia las 14.30 horas, la congestión provocada en el cruce entre las calles de la Ermita y Elizgibela, obligó a agentes municipales de Burlada a regular el tráfico.

desvío A lo largo de la mañana, trabajadores del servicio de obras también desviaron el tráfico de algunas calles cortadas, como la mitad de la avenida María Azcarate hacia la rotonda de Camino del Cementerio.

Según fuentes de la Policía Municipal de Burlada, estaba previsto que las obras de la rotonda del Cementerio estuviesen acabadas a primera hora de la tarde de ayer. A partir de entonces, "irán cortando la calle San Francisco por tramos" para su asfaltado. A última hora de ayer, la circulación en la rotonda recuperó la normalidad.