ESTELLA-LIZARRA. Así, el departamento de Fomento ha llegado a un acuerdo, según ha informado, para que "por voluntad" de esta empresa, que es la concesionaria del servicio, el Tierra Estella Bus llegue hasta la puerta de la residencia. De esta forma se evita que dos días por semana los ancianos tengan que superar las 95 escaleras que separan a la residencia de la otra parada del Tierra Estella Bus.
Fomento explica que no puede obligar a esta concesionaria a subir a Santo Domingo porque no existe esa parada, pero se da la circunstancia de que fue en 2010 cuando el propio Gobierno de Navarra, tras varias reuniones con el Ayuntamiento, decidió que este servicio, que ya hacía La Estellesa de forma voluntaria, se dejase de ofrecer. Después, el Consistorio requirió a Transportes que lo repusiera y este departamento, presidido entonces por Laura Alba, denegó la parada. Ahora y desde hace unos días el Tierra Estella Bus vuelve a subir aunque con limitaciones porque lo hace dos días por semana, los martes y jueves, y en dos ocasiones en cada sentido. De esta forma el autobús sale desde la residencia a las 10 y a las 17 y regresa a las 12.15 y a las 19.15 horas.
PROBLEMAS
La reposición del servicio ha sido posible gracias a la solución de varios aspectos técnicos que fueron los que esgrimió Transportes en 2010 para denegar la parada. Por ejemplo, hace un año se eliminaron unos bolos que impedían que el bus diese la vuelta y se rebajó un bordillo que provocaba que los bajos del vehículo pegasen contra el asfalto. Pero es que además, en el informe de denegación también se argumentaba que subir a Santo Domingo retrasaba el servicio y que existía mala visibilidad en la incorporación del autobús al puente Fortunato Aguirre. Estos últimos datos los rebatió el Consistorio y es que por ejemplo, el edil José Ángel Izcue (PSN) aseveraba que el retraso esgrimido, unos cuatro minutos, no era preciso.
La decisión de La Estellesa de asumir este servicio es muy importante para el centenar de ancianos de Santo Domingo puesto que la propia localización de la residencia es un problema con el que cuenta esta institución porque, si bien está en el casco histórico de la ciudad, se encuentra en un alto y su acceso es complicado para personas mayores. De hecho, uno de los objetivos que se persigue con el futuro y anunciado traslado de Santo Domingo a la parcela de la residencia de San Jerónimo, junto a Los Llanos, es que los residentes se encuentren precisamente en el centro de la ciudad.