cintruénigo. El domingo a las 6.30 horas regresó a Cintruénigo la expedición de la peña taurina Sergio Sánchez formada por 32 personas tras haber permanecido una semana por tierras de Andalucía visitando diversas ganaderías.
El viaje, que se realiza desde hace bastantes años coincidiendo con el puente de San José, se inició el pasado 17 de marzo . El primer destino de la expedición fue Córdoba, donde los asistentes pudieron conocer la mezquita, la sinagoga y los jardines de los alcázares. En la ciudad de los califas, la expedición cirbonera, que había vivido una intensa mañana cultural, celebró una comida antes de emprender el viaje a Sevilla.
En la capital hispalense, los miembros de la peña taurina Sergio Sánchez visitaron las ganaderías Jódar y Ruchena, Campos Peña y Los Recitales. Además, aprovecharon para conocer el patrimonio artístico de la localidad. El viernes, por su parte, los cirboneros se desplazaron a tierras onubenses para visitar la ganadería Arucci a la que la expedición cirbonera acude todos los últimos años, mientras que un día más tarde conocieron la ganadería Navalrosal situada en la localidad pacense de Llerena. En todas ellas, los asistentes disfrutaron de la hospitalidad de los ganaderos, que exhibieron grandes lotes de reses bravas y ofrecieron los mejores platos de su gastronomía a los asistentes. Por su parte, los peñistas no dudaron en obsequiar a los anfitriones con diversas esculturas que simbolizaban a los toros marcados con el hierro de su ganadería o a rejoneadores.
Además de conocer las ganaderías, algunos de los miembros participaron en los actos. Este fue el caso del becerrista cirbonero y alumno de la escuela taurina de El Juli en Madrid, Javier Marín, que formó parte de una tienta celebrada en la ganadería sevillana Los Recitales, propiedad de Salvador Martín.
en corto
l Gastronomía navarra. Además de otorgar varios obsequios a los ganaderos durante la visita a sus fincas, los miembros de la peña taurina Sergio Sánchez ofrecieron también su gastronomía. Así, en la ganadería de los marqueses de Jódar y Ruchena, propiedad de Luis Valdenebro, los cirboneros prepararon una comida a base de alubias pochas que disfrutaron entre todos. Por otro lado, en la última finca que visitaron, perteneciente a la ganadería Navalrosal situada en la localidad pacense de Llerena, los expedicionarios realizaron una paella de marisco para comer justo antes de emprender el camino de vuelta a Cintruénigo.