olite. La Bodega Cooperativa Cosecheros Reunidos de Olite conmemoró ayer el centenario de su creación de la mano de un lunch y una comida a la que acudieron socios, exsocios y familiares, en total unas cien personas. Fundada en 1913 por una docena de propietarios, Cosecheros Reunidos puede presumir de ser la segunda cooperativa más antigua de Navarra, estando sólo por detrás de la Bodega Cooperativa Olitense, fundada por el padre Victoriano Flamarique dos años antes, en 1911.

¿Qué diferencia a estas dos cooperativas? Pues bien, según Pascual Tamburri, actual presidente de Cosecheros Reunidos, la principal diferencia es que la primera se creó entre agricultores muy pequeños y con un afán "benéfico, caritativo y cristiano", mientras que la segunda, que aunó a agricultores algo más grandes, siempre tuvo "carácter empresarial".

En los años 40, además, surgió en Olite una tercera bodega cooperativa, de nombre San Vidal, que no cuajó y acabó cerrando. Sus socios, entonces, pasaron a integrar la bodega Cosecheros Reunidos, que en aquella época vivió su máximo esplendor.

El germen para la construcción de esta cooperativa, que a día de hoy sigue manteniendo su sede en el edifico histórico original (plaza San Antón), fue la creación en 1910 del sindicato de labradores, del que posteriormente saldría la idea de levantar esta bodega. Y es que en aquella época el cooperativismo cuajó en la sociedad siendo la fórmula más sensata y eficaz , a todas luces, para afrontar una crisis tan grave como fue la de la filoxera (un parásito que afecta a la vid).

La capacidad total de sus instalaciones es de 1,8 millones de litros, cuyos depósitos acogen el mosto y el vino de 300 hectáreas de viñedos de unos 90 socios. La mayor parte del vino se vende sin embotellar a otras marcas.

De un tiempo a esta parte, sin embargo, la bodega se está abriendo paso en el sector turístico, tanto que actualmente tiene el honor de ser la que más turistas recibe de toda la Zona media. Sólo en Semana Santa tuvo 1.000 visitas, una cifra que se eleva hasta las 5.000 cuando hablamos de los doce meses del año. La clave de su éxito es, probablemente, que el recorrido por sus instalaciones se realiza en varios idiomas: en alemán, en inglés y en francés. A corto plazo, además, la bodega pretende crear, aprovechando esta efemérides, una exposición permanente que contenga documentos y fotografías antiguas para hacer más atractiva, si cabe, la visita guiada.