Síguenos en redes sociales:

Aparcar en Estella . La plaza de toros

Llevamos unas semanas con el nuevo sistema de aparcamiento y parece que funciona, siempre hay sitio y hay rotación, tal y como pedían los comerciantes. Lo cierto es que ahora cuando los que vivimos en la Merindad venimos a Estella sabemos que vamos a tener sitio para aparcar cómodamente y que tenemos muchas opciones. Podemos dejar el coche en el centro y gratis. Bien es cierto que tenemos que estar atentos a la hora y no pasarnos de 90 minutos pero para hacer recados ese tiempo es más que suficiente. El otro día me comentaba una amiga que a ella no le gusta porque antes echaba dinero a la zona azul y cuando se acababa el tiempo iba a echar más y así sucesivamente. Yo le dije que eso no tenía ningún sentido, a mi entender. Es decir, si se quiere quedar más rato tiene dos opciones sin tener que estar pendiente del coche y de la hora. Una es aparcar en otras zonas gratuitas donde no está limitado el tiempo, como puede ser el aparcamiento de los juzgados, que está muy céntrico aunque hay que subir la cuesta, o el sector B que también está muy cerca de todo. La otra opción si se quiere aparcar en el centro durante más de hora y media, es meter el coche en el parking subterráneo. Esta posibilidad es muy buena también porque tienes el coche en el centro, sin subir cuestas y el parking en sí está muy bien. Las plazas de aparcamiento son bastante amplias, no como ocurre en otros aparcamientos de otras ciudades que son muy estrechas, y está muy limpio, la verdad. Por todo esto creo que ahora en Estella tenemos muy buenas opciones para aparcar. Gratis en el centro durante hora y media, gratis un pelín más alejado durante todo el tiempo que deseemos y pagando en el centro sin límite de tiempo en el parking subterráneo. Ahora hace falta que todas estas comodidades tengan su consecuencia en que Estella siga siendo una ciudad viva, a la que la Merindad se acerque y en la que el comercio y la hostelería sigan ofreciendo sus mejores servicios.

O.A.S.

Qué jaleo se ha montado con la apertura de la plaza de toros como un espacio de esparcimiento canino. Vaya por delante que a mí me parece bien que se abra este espacio que está cerrado todo el año y que, no hay que olvidar, es municipal. Respeto, aunque no comparto, que haya a quien no le guste. Pero no escribo esta carta para defenderlo, sino porque me ha sorprendido cómo una decisión que no tiene mayor trascendencia (más allá de que los perros puedan disfrutar) y sin apenas coste económico para los estelleses, haya acabado siendo una noticia a nivel estatal en la que determinados comentaristas y periodistas, que defienden las corridas de toros, lo hayan considerado como una afrenta a todo lo español. ¿De verdad?, ¿en serio? qué enrevesado todo.

I.M.D.