pamplona - Sergio Fayanas, de 41 años y de Pamplona, es el propietario de la tienda Biopompas Pamplona, droguería que vende todo tipo de productos a granel que tiene como característica que son biodegradables, veganos y que apoyan la reutilización de los envases. Para Fayanas había llegado la hora de combatir el desastre medioambiental. “La idea de vender droguería natural a granel surgió a raíz de ver el grandísimo problema que tenemos con los plásticos, para intentar paliar de alguna manera ese consumo excesivo”. Él siempre recibió una educación en la que el reciclaje era importante, “pero me he dado cuenta que con eso no era suficiente”. “Hay que cambiar el reciclar por el reutilizar si queremos tener un futuro”, comentó Sergio Fayanas.

En este comercio, situado en la Rochapea y que lleva abierto desde el año 2014, todos los productos son ecológicos en mayor medida y biodegradables. Para el propietario “la idea es que sean lo más sanos para nosotros, para nuestro cuerpo, y para la naturaleza”. Sus estanterías cuentan con una gran variedad de productos, los cuales parten de la base de que no tienen niquel, kathon, fosfatos, parabenos, blanqueantes ópticos, amoniaco, encimas, siliconas, sulfatos, conservantes. Se pueden encontrar productos de lavado de ropa, higiene personal, limpieza del hogar, cosmética ecológica y de higiene para mascotas. Porque “las mascotas también tienen problemas en la piel y estos champús les vienen muy bien, son hipoalergénicos”.

“Las principales familias serían los detergentes líquidos de lavadora, de los que hay una variedad bastante amplia en cuanto a olores. Luego ya hay especiales para niños o para gente que tiene problemas en la piel, que cada vez son más, llamados hipoalergénicos y jabones naturales como el natural de escamas de Marsella”, expresó Sergio Fayanas.

En cuanto a los productos de higiene personal, Fayanas explica que “la gente cada vez utiliza más los jabones de trozo para su higiene corporal y los champús y geles líquidos, poco a poco se animan más a usar estos productos en sus cuerpos. Eso sí, vendo mucho más los jabones corporales líquidos que los de trozo, la gente está más acostumbrada a ellos y a veces no saben muy bien cómo ducharse con los de trozo”.

Aquí, salvo las pastillas de lavavajillas, los productos de cosmética ecológica y otros variados como las bolsas reutilizables que se venden como novedad, todo se vende al peso. Los clientes traen consigo envases para reutilizarlos en el establecimiento y así continuar con la filosofía del mismo.

clientes En lo que respecta a los consumidores, a pesar de que hay fieles desde el primer día “todo aquel que viene a probar repite”. Además de por los productos de calidad, los que eligen entrar a este establecimiento lo hacen porque de esta manera “aportan su granito de arena al medio ambiente”,

“Entiendo que lo más fácil es ir a una gran superficie a hacer toda la compra y que esto requiere un esfuerzo, pero si vienes aquí lo haces por convicción y cada vez más gente se da cuenta y se anima a venir. Como consumidores tenemos el poder de hacer cambios para que las grandes empresas, los lobbies, cambien su forma de hacer el producto y no utilicen tantos plásticos o los utilicen biodegradables, que existen pero no les sale rentable utilizarlos”, añadió Sergio Fayanes. Personas de todas las edades deciden entrar a comprar. A pesar de que los jóvenes que no disponen de muchos medios aún no compran mucho, sí lo hacen personas mayores, que aunque son más tradicionales “muchos vienen y acaban convencidos con el producto y hay otros que ya vienen convencidos y seguros de lo que quieren”.

El hecho de que sea el barrio de la Rochapea donde este esta tienda no es casualidad: “Decidí abrir aquí la tienda porque, como digo yo, esto es el triángulo de las bermudas de lo ecológico. En esta misma zona esta Landare, donde venden productos de alimentación ecológicos a granel, y el restaurante vegano y hay movimiento de gente que tiene este tipo de conciencia y que consume este tipo de productos”, confesó Sergio Fayanas.

Este es un “comercio diferente”, donde el trato cercano del comerciante impide que las compras se hagan de prisa.