pamplona - El canon medioambiental que aplica el Gobierno de Navarra con la entrada en vigor de la nueva Ley foral de Residuos supone el pago de 20 euros por tonelada vertida. De las casi 152.000 toneladas de residuos urbanos que se generan en el ámbito comarcal al vertedero llegan alrededor de 94.000 (62%) y, de ellos, sin tratar se vierten 87.476 toneladas. Así, la factura para la MCP es de dos millones. No solo eso sino que el incumplimiento de la normativa conlleva además la imposición de sanciones que este año se han cifrado en 110.000 euros. “La mayor aberración económica es tener que pagar sanciones y multas”, abundó. Precisamente por ello la nueva planta está dirigida, señaló Campión, a la fracción resto, “que no se puede tratar en el centro de Góngora porque ahí no cabe”. “No se puede utilizar la planta de envases porque tendría que ser cuatro veces más grande”. Remarcó también que el convenio con Aranguren es más que una previsión de explotación temporal, y habló del efecto disuasorio que tendría para cualquier pueblo “tener que asumir que su solidaridad con el resto va a durar un siglo y, si el residuo se estabiliza, otro siglo más”. Negó además que la nueva planta fuera una aberración económica porque “la misma inversión habría que realizarla ahora, independientemente del sitio elegido, incluso en Góngora, porque hay que hacer una planta para el tratamiento de la fracción resto”. “Hay que integrar para optimar los costes de funcionamiento la planta de envases en la planta de fracción resto, hay que construir una planta de tratamiento de residuos orgánicos del quinto contenedor, otra para la fracción resto; instalaciones de compostaje, de bioestabilizado, de aprovechamiento del biogas y el biometano.... De Góngora solo es reinstala la planta de tratamiento de madera”.

En la sesión, el portavoz socialista, Ramón Alzórriz, denunció que la Comarca de Pamplona lleva diez años de incumplimiento legal en este tema y defendió un proyecto de “interés general para Navarra”. Pablo Azcona de Geroa Bai puso de relieve los desestimientos a todos los intentos de parar por vía judicial las decisiones tomadas en este tema. Por su parte, Sánchez de Muniáin, de Navarra Suma opinó que “la pregunta es por qué no se puede hacer en Góngora, aprovechando todas las instalaciones”, y declaró que la MCP podía haber revisado el convenio con el Valle de Aranguren, como se ha hecho en otras ocasiones por interés público. - A.I.