onfiesa Flor Hernández, de 43 años y vecina de Carcastillo, que le temblaron las piernas cuando le dijeron que le habían elegido para ser promotora de salud en su zona. Fue en 2003, aunque ella siempre ha tenido inquietud por hacer cosas para su comunidad. Por implicarse, superar barreras y derrumbar prejuicios. Mujer, gitana y del ámbito rural, esta técnica en Integración Social es también desde hace años voluntaria en distintas asocaciones, donde despertó su interés, sobre todo, por ayudar a las mujeres más jóvenes. Promueve la salud y la socioeducación a través de los programas financiados por los departamentos de Salud y Derechos Sociales del Gobierno de Navarra, con la Federación de Asociaciones Gitanas de Navarra Gaz Kaló, formando parte de un equipo técnico intercultural y multidisciplinar.

Pasa estos días de cuarentena trabajando desde casa, "poniendo tiritas en una herida que se ha convertido en hemorragia...", señala, y confiesa cierta sensación "de impotencia, porque no es lo mismo hacer mi trabajo en una situación de normalidad, en la prevención, que actuar en una situación de alarma y emergencia como la que estamos viviendo. Nadie estaba preparado para esto. En estos días estoy en contacto con muchas familias y muy cerca de los recursos comunitarios, estamos en modo 'urgencias': escuchar necesidades y demandas, acoger, acompañar, orientar y apoyar", relata.

Ella intenta garantizar una cuarentena lo más digna posible en la que los usuarios puedan tener los alimentos y las necesidades básicas cubiertas. "Nos llegan llamadas tanto de familias muy preocupadas por la situación como de diferentes recursos o instituciones para que mediemos o intervengamos". Explica que lo más importante ahora es atender la crisis que viven quienes tenemos alrededor, "sus preocupaciones, sus miedos, sus carencias€ Y a la vez tenemos que cuidar las nuestras propias. Todos los días vemos a gente que lo está pasando mal y a mucha otra que lo ha podido superar. Esto desborda a cualquiera y todavía no nos hacemos a la idea de la repercusión que va a tener después".

Flor no se viene abajo, y asegura que a pesar de todo siguen trabajando sin parar intentado dar respuesta. "Esta crisis ha paralizado el mundo, pero tenemos que ser conscientes de que unos la están viviendo desde condiciones privilegiadas y otros desde los márgenes", lamenta.

Gracias al trabajo realizado y a las redes que han ido tejiendo durante años, cuentan ahora con la colaboración del Ayuntamiento, de los diferentes Servicios Sociales de Base, de los centros de salud y educativos "que nuestras familias tanto necesitan, y nos están ayudando en estos momentos de incertidumbre. Las zonas rurales somos las grandes olvidadas, siempre a la cola y al mismo tiempo invirtiendo todos nuestros esfuerzos para que se nos reconozca y se nos visibilice. Queremos tener las mismas posibilidades y los mismos recursos que en Pamplona y Comarca", demanda. Para ello, dice, "viene muy bien la ayuda de la Federación Gaz Kaló, que intenta llenar esos vacíos que sufrimos en los pueblos. Siempre hemos trabajado con flexibilidad y estamos acostumbrados a pelear y a pensar varias soluciones a los problemas, por eso el teletrabajo ha sido un aprendizaje más. Con las nuevas tecnologías la coordinación es permanente", señala.

Muchas de las familias que conoce viven de la venta ambulante, de los mercadillos, "y con la actual situación han desaparecido sus ingresos, va a ser catastrófico. Familias que nunca habían tenido necesidad de solicitar alimentos básicos, ahora los están demandando. La Renta Garantizada no garantiza todo, no cubre todas las necesidades, ya que las familias de alta exclusión están endeudadas con préstamos de dinero 'fácil'. Las familias con las que me toca trabajar son familias extensas, viven diez o doce personas en una casa, y en muchas ocasiones las casas no reúnen condiciones de habitabilidad, humedades, goteras€ ¿Alguien se ha preguntado si en estas condiciones los menores pueden hacer sus tareas escolares, hacinados en una vivienda, sin un lugar para hacer deberes? -lamenta Flor-. Para eso las asociaciones organizamos los apoyos escolares, con ayuda de las subvenciones, pero ahora es más difícil ayudarles directamente". Durante este confinamiento tratan de ayudar también a la hora de realizar trámites, con los medios telemáticos de los que disponen y para facilitar la comunicación, los servicios y agilizar la burocracia.

Además, desde Gaz Kaló han emitido un comunicado para decir ¡Basta ya! El racismo se contagia más que el Covid19. "Hemos normalizado la discriminación a ciertos sectores de la población, y alguna se lleva practicando toda la vida. Pero todas las personas contagiadas merecen nuestra solidaridad y afecto, sin distinción por orígenes étnicos o cualquier otra característica personal. Es reprobable que haya quienes aprovechen este episodio para mostrar su cara más cruel, llena de prejuicios, de rechazo y de odio. Esto no se debe consentir y nos parece innecesario añadir más dolor a las familias, que están padeciendo esta pandemia igual que toda la sociedad".

Han realizado dos audiovisuales de mujeres gitanas para su "empoderamiento con poderío, el empoderío, así lo llamamos nosotras" y en uno de ellos contamos un ejemplo que me gusta mucho. En un puré, todos los ingredientes se baten y pierden su textura original; en cambio, en una ensalada, cada alimento sigue siendo lo que es, pero juntos conforman la ensalada. Esta es la lucha de nuestro trabajo: más que integración, yo prefiero la palabra convivencia. Respeto por parte de todos", señala Flor.

Asegura que sigue habiendo "mucho desconocimiento de la cultura gitana, y en los medios solo aparecen noticias negativas. Es el momento de tender manos y puentes, y de crear espacios para conocernos. Una compañera de Gaz Kaló me dice que cuando escucha nuestras historias, le recuerdan a algunas que le contaban sus padres. Esa es la única diferencia, una generación. Y si logramos que nuestros chicos y chicas estudien y trabajen, si rompemos la transmisión intergeneracional de la pobreza, podremos salvar ese escalón que nos separa".