- El Ayuntamiento de Pamplona tiene previsto iniciar esta semana la "intervención táctica" que dará lugar a un carril bici bidireccional que unirá el paseo de Sarasate y la plaza de Europa. El carril, de dos kilómetros de longitud, recorrerá Yanguas y Miranda, por el paso de cebra de la plaza de la Paz se llegará a la avenida del Ejército y de ahí a la avenida Bayona.

El concejal delegado de Proyectos Estratégicos, Movilidad y Sostenibilidad, Fermín Alonso, ha asegurado que los trabajos, que deberían haber iniciado ayer, se harán por "tramos" y que el primero de ellos será el de Yanguas y Miranda. De ahí, las obras pasarán a la avenida del Ejército y por último lugar se hará una "intervención táctica" en la avenida Bayona. Fermín Alonso no se ha atrevido a poner fechas, ha asegurado que la idea es "que no haya parones entre los distintos tramos", pero, a su vez, ha reconocido que "dependemos de los pedidos de separadores". El concejal de Movilidad ha afirmado que aún así quieren tener el proyecto listo "para el final del verano".

En el caso de la avenida Bayona, y al igual que en la avenida del Ejército, se eliminará un carril de circulación de vehículos a motor en dirección plaza de Europa. El carril bici en esta avenida transitará pegado a la acera y, como consecuencia, la línea de aparcamientos de coche se desplazará hacia la izquierda.

En general, los residentes de la avenida Bayona ven el proyecto con buenos ojos. "Me parece muy bien. Es algo que poco a poco se tiene que ir haciendo", asegura Pedro Tambó, vecino de San Juan. "Me parece fenomenal", comenta Flora Pérez.

Eso sí, los vecinos quieren que los ciclistas usen el carril, algo que creen que no pasa en la ciudad: "El carril bici es para que luego los ciclistas lo usen, porque hay quien no respeta y va con la bici por las aceras", indica Jesús, vecino de la avenida Bayona. "Hay ciclistas que van por la acera sin ningún cuidado y no se dan cuenta de que pueden atropellar a un peatón", confiesa Flora.

Los vecinos no creen que la reducción de un carril para coches vaya a afectar a los establecimientos de la avenida: "La gente que viene aquí a comprar es del barrio y vive cerca de las tiendas. Por eso creo que seguirán teniendo los mismos clientes", opina Pedro Tambo. "La gente que compra en la avenida Bayona seguirá yendo", opina Flora Pérez.

A los distintos establecimientos de la zona también les gusta el proyecto: "Cuantos menos se coja el coche mejor", afirma Antonio Chamorro, uno de los socios del bar El Molino. "La avenida Bayona tiene muchos carriles y se puede habilitar uno por el que circulen las bicicletas", aseguran desde la tienda de reparación de móviles Quasi Novi.

Sin embargo, y aunque está de acuerdo en fomentar el uso de la bicicleta y todo lo que sean "medidas saludables para la población", la farmacéutica Cristina Cabiró no cree que el proyecto vaya a salir bien: "La avenida con tres carriles ya está bastante llena de coches. Con un carril no sé por dónde van a pasar todos". Cristina añade que Pamplona "se está convirtiendo en una ciudad en la que es difícil circular". Ignacio Rouzaut, dueño de la óptica Rouzaut, apoya el proyecto, pero cree que al Ayuntamiento le falta planificación en el campo de la movilidad: "Es un poco 'hoy pico aquí, mañana pico allá'. Da la sensación de que no tienen un plan concreto", opina. Como consecuencia, según Ignacio, algunas peatonalizaciones o reducciones de tráfico han perjudicado a otras calles. Ignacio pone el ejemplo de la actuación en la Vuelta del Castillo y Pío XII y sus consecuencias en Monasterio de Urdax, donde "ahora tenemos dos veces más de tráfico" "Esto no pasaría con un programa general", subraya.

La mayoría de establecimientos no esperan perder clientes debido a la remodelación de la avenida. "Los clientes que vienen al Letyana es gente de toda la vida, del barrio y vienen andando. No creo que nos afecte para nada", explica José Ángel Mateo, camarero del Letyana. José Ángel añade que, además, no hay muchas plazas de aparcamiento: "Tenemos los contenedores, las zonas de carga y descarga, y las paradas de la villavesa". Los clientes del bar El Molino también son de toda la vida: "Son del barrio y no vienen en coche. La eliminación de un carril para coches no nos va a afectar", opina Antonio Chamorro.

"Es una calle con muchos coches. Con un carril menos, no sé por dónde van a pasar"

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